Manel Comas 'liquidó' ayer su proyecto en el Polaris World Club Baloncesto Murcia. Cuando sólo han transcurrido tres meses de competición, el veterano técnico catalán ha optado por marcharse al Caja San Fernando, de la Liga ACB, pese a que llegó el pasado verano con un proyecto ambicioso con una duración de dos años.
La situación que está viviendo el equipo murciano no es la que se esperaba a estas alturas de la competición. El Polaris World lleva cinco victorias y otras tantas derrotas. Su imagen desde que se inició el torneo no ha convencido a nadie, ni siquiera al propio Comas, que ha aprovechado la oferta que le ha llegado desde Sevilla para 'abandonar el barco'.
La entidad que preside Salvador Hernández ha utilizado la coyuntura para liberarse del compromiso que tenía adquirido con Comas por dos campañas. "A la vista de la oferta de la ACB que tenía, hemos liberado del compromiso a Comas, ya que es una propuesta atractiva para él", afirmó ayer el presidente en rueda de prensa. Hernández también expresó que la marcha de Comas "es una buena solución", dejando entrever que ni el club ni el técnico están satisfechos con la trayectoria del conjunto.
De hecho, Comas, quien en más de una ocasión agradeció a Polaris World el trato recibido, comentó que "no le hubiera propuesto al club mi marcha si en lugar de cinco victorias lleváramos ocho porque seguro que no me habrían dejado". Aunque no lo dejó claro, algo ha debido cambiar en las dos últimas semanas porque desveló que "hace quince días" le había llegado la oferta del Caja San Fernando, pero que entonces "ni se planteó" aceptarla. De hecho, llegó a decir que "cuando me la hicieron, ni la valoramos".
Comas, visiblemente emocionado, explicó que "relativamente le he devuelto al club la confianza que ha depositado en mí" y que "lo dejo esperando que sea bueno". Sin embargo, el catalán, que hoy será presentado como entrenador del Caja San Fernando en sustitución de Javier Fijo, comentó que "estoy convencido de que estábamos en la línea correcta para lograr el ascenso. El equipo tiene todas las bases para subir, pero nos falta saber rematar los partidos y controlar la ansiedad", declaró.
Comas fue sincero y reconoció que la Liga LEB, categoría en la que nunca había entrenado, "es mucho más complicada de lo que yo esperaba", y rechazó que su marcha se debiera a que el club le haya negado algún fichaje.
El catalán también se mostró rotundo al afirmar que "sin ninguna duda que volvería" y señalando al presidente comentó que "con este señor yo voy al fin del mundo".
