Crítica de danza

La danza de los doce siglos de Murcia: corazón, historia y contemporaneidad

"Los amantes de la danza tuvimos la suerte de que parte de la inauguración de la programación corriera a cargo de la Compañía Nacional de Danza"

Acto por el 1200 aniversario de la fundación de la ciudad de Murcia, en Belluga.

Acto por el 1200 aniversario de la fundación de la ciudad de Murcia, en Belluga. / Israel Sánchez

Tania Herrero

El domingo pasado, los amantes de la danza tuvimos la suerte de que parte de la inauguración de la programación por los doce siglos de la ciudad de Murcia corriera a cargo de la Compañía Nacional de Danza, cuya directora es la murciana Muriel Romero.

Su actuación se dividió en dos momentos. El primero de ellos tuvo lugar por la mañana en la Plaza de Belluga, a través de una alegre, divertida y grandiosa perfomance, 12 siglos de corazón, en la que gran parte de los bailarines de la compañía mostraron su destreza y corporalidad a través de una gran gama de movimientos dirigidos mediante una improvisación pautada.

Esta improvisación llenó la plaza de un engranaje de imágenes donde el espacio y la plasticidad de los cuerpos bailantes convergían con la renovada fachada de la Catedral, involucrando pasado y presente gracias a los movimientos que, en ocasiones, nos revelaban bailes de otras culturas presentes en la idiosincrasia de la historia de Murcia, sin olvidar esa mirada actual de la danza contemporánea.

Esta improvisación finalizó con la integración en la misma del alumnado de los últimos cursos de la especialidad de Danza Contemporánea y Danza Clásica del Conservatorio Teresa Souan de Murcia.

La segunda propuesta se realizó por la tarde, en las tablas del Teatro Romea, presentando un programa mixto en donde destacaron piezas clave del repertorio clásico de la compañía junto al estreno absoluto de la primera pieza creada por Muriel Romero para la formación.

Remansos abrió la velada con esa delicadeza de las formas presentes en las coreografías de Nacho Duato. Una obra interpretada por Sara Fernández, Alessandro Riga, Ana Calderón, Juan José Carazo, Pauline Perrault y Anthony Pina de forma exquisita.

Y la parte de repertorio más clásico se inauguró con Tschaikovsky Pas de Deux, interpretada por Hamin Park y Yanier Gómez, donde destacó la delicadez de la bailarina y los imponentes saltos del papel masculino.

En Diana y Acteón, Martina Giuffrida y Thomas Giugovaz comulgaron con la fuerza necesaria para la interpretación de este famoso paso a dos y también con la inclinación del escenario, mostrando unos maravillosos fouettes y unos cambrés espectaculares. Y con El cisne blanco, el repertorio clásico llegó a su máxima expresión. La elección de Giada Rossi y Yanier Gómez no pudo ser más acertada, puesto que la combinación de fuerza, precisión y delicadeza hicieron suspirar al público, siendo una de las mejores interpretaciones de la noche.

Esta parte se cerró con un final de fiesta donde los bailarines siguieron mostrando su pericia técnica, pero, para finalizar este acto conmemorativo, se presentó el estreno absoluto de Cuerpos resonantes. Esta pieza rompió los esquemas de las coreografías anteriores, y tras la parquedad de los pasos a dos, donde la escena evoluciona entre dos intérpretes, el espacio del escenario se magnificó con la presencia de 35 bailarines.

Esa magnitud se veía consolidada por los movimientos desarticulados de los intérpretes, que perdían, a la vez que mostraban, su personalidad dentro de la coreografía. Un canto a la corporalidad y la expresión desnuda del cuerpo donde los intérpretes fluían como envenenados por la presencia del otro e hipnotizados por el ambiente sonoro creado de forma magistral por Pablo Palacios.

Una combinación de luces, sonidos y movimiento embriagador, sobre todo si te dejas llevar ante la posibilidad de que el lenguaje contemporáneo en la danza promueve la belleza de lo diferente.

En definitiva, una coreografía carismática que enlaza con este nuevo rumbo y lenguajes más contemporáneos que la nueva directora esperemos que integre en esta gran compañía. Un acierto total como comienzo de estas celebraciones que invadirán la ciudad de Murcia durante este año.

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