En su rincón
Marisol Ferreira, la vida te trae las cosas
Tras vivir en numerosas ciudades del país, esta intérprete se estableció en Cartagena, desde donde abrazó su pasión: el teatro

Marisol Ferreira en el Teatro Romano de Cartagena. / Javier Lorente
De familia mitad gallega y mitad andaluza, de padre marino mercante, María Soledad Ferreira Capetillo nació en El Ferrol. El trabajo de su padre, y después, el de su marido (ingeniero de centrales nucleares) le ha llevado a vivir en numerosos y diversos lugares de toda España. Con el tiempo se establecieron en Cartagena y ella se integró en el ambiente cultural de la ciudad, particularmente en una pasión que ha mantenido desde niña: el teatro, que ha cultivado en los espectáculos dramáticos de cartagineses y romanos y en varias compañías teatrales de la ciudad y también de Murcia y otros lugares de la Región.
Marisol es una trabajadora incansable, siempre actuando en varios proyectos teatrales a la vez y aún con energías de sobra para otra de sus pasiones: el deporte, especialmente correr por los montes de la costa. Ha participado varias veces en la Ruta de las Fortalezas: «Me gusta cuidarme, mantener la mente y el cuerpo sanos te rejuvenece. He corrido mucho y ganado trofeos en muchas carreras, aunque las rodillas empiezan a pesar y me voy decantando por la tranquilidad del senderismo, sobre todo por el entorno de esta hermosa ciudad privilegiada, con montañas, campo y mar. Estoy en un grupo senderista y hacemos salidas y viajes por otras regiones: el próximo, por la zona de Alcalá». Me cuenta sobre su vida laboral, que quedó en paro cuando la última crisis económica pero que trabajó durante veinte años en una gran empresa, en temas relacionados con su formación de Riesgos Laborales, Auditorías de Calidad y cuidados del Medio Ambiente.
"Últimamente estoy descubriendo la comedia, reconozco que es más difícil hacer reír que hacer llorar, pero empiezo a sacar esta faceta en mí"
Enamorada de la cultura y las fiestas de su ciudad, desde 1992 ha estado implicada en Carthagineses y Romanos, ha sido directiva romana y responsable de protocolo en la Federación Festera, y representado diversos personajes en los actos teatrales, el último de ellos la Alegoría de la Destrucción de Sagunto. «Había hecho teatro desde niña en el cole, que ya hacía de Virgen María. La crisis se convirtió en el mayor regalo para mi vida. Nunca había tenido tiempo para nada, pero con mis hijos ya mayores pude estudiar inglés, francés e italiano, y teatro. Conocí, haciendo senderismo, a la directora Almudena Martínez y me animó a que me presentara a un casting. Lo superé y actué en una obra por la que mi actuación ganó un premio en un certamen teatral. Una señal. Desde entonces no he parado, aprendiendo con ansia y actuando. Llevo 18 años en la Escuela de Teatro de Alquibla, con Antonio Saura, y estuve tres con Enrique Escudero».
¿Y ahora ? «Estoy en la Compañía Agosto del 36, haciendo Bodas de Sangre, dirigida por Marina Cabañero y Teresa Franco. Entre otros escenarios, la vamos a llevar a Almería y también al Romea de Murcia. Hemos tenido 14 nominaciones en los Premios Azahar de la Región. Ha sido muy importante para mí estar nominada, y una alegría recoger varios premios, entre otros el de ‘Mejor Espectáculo Teatral’». Y sigue: «También estoy en el Grupo de Teatro de San Javier, haciendo Antígona y también Coriolano. Es magnífico actuar bajo la dirección de José Antonio Navas, presidente de la Asociación Regional de Dramaturgos».
Junto a Carmen Garrido y otras, Marisol ha creado una Asociación Teatral sin ánimo de lucro que se llama Ecléctika Teatro. Están representando un montaje titulado Juego de damas, escrito para ellas por el citado Navas: «Es una magnífica comedia para cuatro personajes femeninos por la que siento una satisfacción infinita». Y me sigue contando proyectos en los que participa y uno se pregunta de dónde saca esta mujer tanto tiempo y tanta energía.
«También estoy actuando con Aladroque Teatro de Lito Campillo. Hacemos una obra de José Pascual Abellán que se llama Locas, una interesantísima pieza sobre la salud mental, con un punto de humor y con mucho respeto, una obra donde se ríe y se llora. En la última representación, entre las felicitaciones, un espectador se me acercó y me confesó que jamás había llorado en un teatro. Remueve sentimientos, la verdad». Marisol me sigue desgranando su apretada agenda para los próximos meses: «El 21 de marzo actúo en el Teatro Villa de Molina con la divertidísima Un espíritu burlón de Noël Coward y al día siguiente, el 22, estaremos en el Teatro Bernal.
Le pregunto cómo puede entrar y salir de tantos personajes diferentes en tan poco tiempo y es apasionante escuchar sus experiencias: «Cuando te caracterizas de un personaje, te mentes dentro de su forma de ser, tanto que te olvidas de tu propia vida y del mundo. El escenario es tu único ‘aquí y ahora’, te olvidas de que eres tú. El teatro te da otra vida. Claro está que se necesitan muchas horas de trabajo y de estudio. Yo aprovecho que soy un poco insomne y le saco todo el partido a las noches. Siempre me ha gustado el drama, me ha parecido más apropiado para mi forma de actuar. Últimamente estoy descubriendo la comedia, reconozco que es más difícil hacer reír que hacer llorar, pero empiezo a sacar esta faceta en mí. Lo realmente satisfactorio es poder trabajar ambas cosas en una misma obra».
La conversación va fluyendo y me confiesa: «Lo más difícil y necesario es estar en continua batalla contigo misma, no anclarte en tu zona de confort. Nadie como Antonio Saura para enseñarte todo esto. Saura va diciendo que se jubilará y descansará del teatro, pero no me lo creo, no me lo imagino sin el teatro, ni me imagino al teatro sin él. Es un maestro y un genio que hace maravillas en la escena. Sin él, no podría haber sacado algunos personajes de dentro de mí, es mucho más que un entrenador, él me modela siempre, estirándome como si yo fuera un chicle. A veces los directores te ven actuar en otra obra y te encasillan y te llaman para que te repitas. Saura siempre te ayuda a reinventarte, desde la raíz».
Me habla con devoción de su gran referente: Meryl Steep, «por su ejemplo de actuación y por su actitud venciendo al paso del tiempo sin operarse el rostro y sabiendo crecer con la madurez». Y terminamos hablando del mar, volvemos a su padre marino, a su marido, Benito, con quien tuvo un barco… Y ya nos perdemos en sus múltiples viajes por el mundo: «Viajar te hace mejor». Claro.
Suscríbete para seguir leyendo
- Más de cien personas, en lista de espera en Murcia para 'abandonar' a su perro
- Detienen 'Reacción en cadena' tras la llamada en directo a uno de los concursantes de Murcia: 'Está viendo el programa
- El Ayuntamiento de Murcia denuncia 'los daños que ya está provocando' la paralización del derribo de los muros de la Cárcel Vieja
- Mapa de la riqueza de las regiones en España
- Dos perros de gran tamaño invaden la carretera y provocan un accidente en Cartagena: los confundieron con jabalíes
- Este es el bar de Murcia donde comes desde 1,2 euros: bravas, berenjenas con miel...
- El tranvía de Murcia se prepara para dar el próximo paso
- En directo: Marbella-Real Murcia