Fiestas

Inmersión sonora y artística en la Noche de los Tambores de Mula

Ya puede visitarse en el Museo Cristóbal Gabarrón de Mula la exposición que homenajea la tradición popular de la tamborada a través de aquello que la hace única: su sonido

Una de las imágenes que acompaña la exposición, que muestra la Noche de los Tambores de Mula. | ANDRÉS GARCÍA MELLADO

Una de las imágenes que acompaña la exposición, que muestra la Noche de los Tambores de Mula. | ANDRÉS GARCÍA MELLADO / Lola lópez

Lola López

Lola López

La tradición de la tamborada lleva retumbando en las calles y la historia de Mula desde el siglo XIX, pero fue hace apenas unos años, en 2018, cuando las tamboradas, esenciales en la identidad y las fiestas populares de numerosas ciudades y pueblos de toda la geografía española, alcanzaron el reconocimiento de Patrimonio Cultural Inmaterial por la Unesco. La Noche de los Tambores de Mula, además, ha conseguido ser considerada Fiesta de Interés Turístico, primero Regional en 1990, después Nacional en 2009 e Internacional recientemente.

La vibración de los tambores muleños se ve ahora reconvertida en exposición artística en la sala La Bodega, el espacio más alternativo del Museo Cristóbal Gabarrón de la localidad. Fragor. La noche de los tambores, Mula, que es como se ha bautizado a la muestra que se inauguró ayer y podrá disfrutarse hasta el 28 de mayo, es un ejercicio experimental que quiere llevar esta tradición hasta un plano novedoso, conceptual y contemporáneo pero sin abandonar aquello que la hace única: su sonido, seña de identidad de este acontecimiento que cada Martes Santo une rebeldía, arte y tradición popular en las calles de la ciudad.

Sus autores, Juan Jesús Yelo Cano (Cartagena, 1964) y Sergio Sánchez Nicolás (Murcia, 1975), han creado en esta sala de exposiciones una espiral auditiva que, a modo de caja de resonancia, pretende transportar al visitante hasta el corazón mismo de la tradición desde un enfoque antropológico y artístico, poniendo la atención en la capacidad de las costumbres para crear identidad a través de rituales colectivos que, de generación en generación, contribuyen a crear pertenencia.

Para ello, han usado grabaciones y documentación sonora de una de esas noches de tambores: la de la Semana Santa de 2018, editadas y tratadas hasta el año pasado en línea, encadenando modificaciones y reconfiguraciones del sonido, hasta dar con el resultado que adapta este rito a los tiempos actuales.

A golpe de percusión, la exposición busca crear recuerdos sonoros y experiencias vivas que unan no solo a los vecinos de Mula, sino a la propia localidad con todo aquel que se anime a visitar este paisaje sonoro. Porque la tamborada late como un corazón.

Las imágenes que acompañan la exposición, obra del fotógrafo Andrés García Mellado (Mula, 1975) refuerzan ese sentimiento de colectividad, retratando un ritual comunitario de fuerza física y emocional a través de instantáneas en las que juega con la abstracción, patrones geométricos y juegos de luces y sombras. El autor capta el alma de la tradición y el proceso previo al ‘romper la hora’, cuando da comienzo el estallido de cientos de tambores sonando al unísono.

A la inauguración de la muestra asistieron un centenar de personas del mundo del arte y la fiesta del tambor que, tras ver la instalación, expresaron su sorpresa ante el realismo conseguido por los autores y el impacto de ver esta fuerte seña identitaria de Mula retratada de este modo.