Once compañías protagonizan el último fin de semana de esta vigésimo primera edición del Festival Internacional de Títeres de la Región, Titeremurcia. Once compañías con once obras de diferente calado y un total de dieciséis representaciones que se celebrarán principalmente en Murcia y pedanías, pero que también alcanzará a Molina de Segura, Jumilla, Los Alcázares, Santomera, Águilas y San Pedro del Pinatar. Será el broche de oro para un evento que este año ha recobrado su internacionalidad y que entre hoy, mañana y el domingo recibe a dos compañías italianas, La Baracca e Irene Vecchia, e incluso a una que llega desde más allá del charco, la mexicana Mondomeraki.

Irene Vecchia será, de hecho, la encargada de abrir la programación de este viernes con Pulcinella, una obra para toda la familia que los más pequeños podrán disfrutar a partir de las 17.00 horas en el templete del Cuartel de Artillería de Murcia, en el barrio del Carmen. Para este montaje –que también podrá verse mañana a las 12.00 horas en el Jardín de las Palmeras de La Paz y el domingo a las 13.00 horas en la Plaza Julián Romea–, la compañía italiana recupera la tradicional técnica del guarattelle: espectáculos de títeres de guante de tradicional napolitana, mientras que en lo narrativo es una reflexión sobre el eterno conflicto entre el bien y el mal.

Dos obras más completan la programación de este viernes: La senda del agua: La huella del Rey Lobo y Luz. La primera es una producción de Teatro de Carmen que se podrá disfrutar gratuitamente en el Centro Cultural de Santo Ángel desde las 18.00 horas. Se trata también de una producción familiar que pretende concienciar de la importancia del líquido elemento, a la vez que recupera la figura del legendario monarca, que revelará a su público cómo transformar una tierra seca y hostil en un vergel. Y Luz, de El Maquinista, que aterrizará sobre el escenario de La Madriguera a las 19.30 horas, nos habla de la apremiante necesidad de cambiar nuestra visión del mundo para encontrar energías sostenibles y limpias que nos auguren un futuro en nuestro planeta.

El sábado arrancará con un taller en el Centro Escénico PupaClown de Murcia: ‘Creatividad entre luces y sombras’. De casi dos horas de duración (de 11.00 a 12.45 horas), y dirigido a niños a partir de 7 años en compañía de un adulto, está enfocado en fomentar la imaginación de los participantes, que deberán desarrollar el final de un cuento tomando como punto de partida la historia de La dama o el tigre, de Frank R. Stockton. Corre a cargo de la actriz Analía Sisamón, directora de La Canela Teatro, y tiene un precio de 20 euros (inscripciones en el correo talleres@pupaclown.org).

En cuanto a lo puramente teatral, y además de la representación de Pulcinella en La Paz, cuatro obras aderezan la agenda del Titeremurcia para mañana. Tres de ellas se representarán a partir de las seis, dos de ellas en Murcia (en el propio espacio de PupaClown y en el Auditorio Municipal de Beniaján) y una en el Ayuntamiento de Los Alcázares. La primera es Cocoué, de Petit Bonhom, en la que actores y títeres dan forma a emociones a emociones como la alegría, la tristeza, la empatía, el miedo, la sociedad... y la amistad.

La segunda es Rojo, de La Canela Teatro, que combina las técnicas de guante y mesa con el uso de la máscara y la narración oral. Se trata de una original y bella propuesta que le da un giro al rol tradicional del diablo y las brujas. Y por último, en Los Alcázares, Magdalena, la otra Frida, la obra de los mexicanos Mondomeraki, que mezclan música, dibujo en vivo y marionetas para tratar la infancia de una figura tan icónica e influyente como la de la artista Frida Kahlo.

La programación del sábado se cierra a partir de las 20.00 horas en la Sala B del Teatro Villa de Molina con Vida, de Javier Aranda, «una joya teatral de pequeño formato, pero de una gran altura artística». En ella, el titiritero zaragozano nos introduce en el fantástico viaje vital de dos personajes, unidos desde su nacimiento. Un montaje «imprescindible» que también podrán disfrutar los aguileños este domingo (12.00 horas) en la Casa de la Cultura Francisco Rabal. También harán una segunda representación Mondomeraki (llevarán a su Magdalena al Teatro El Siscar de Santomera a las 12.00 horas) y La Canela Teatro (que presentará Rojo a esa misma hora, pero en la Casa de la Cultura de San Pedro del Pinatar), además –de nuevo– de Pulcinella, que llegará a la Plaza de Julián Romea a las 13.00 horas.

Pero hay otras cuatro montajes más previstos para este domingo. El primero es La (pequeña) Moby Dick, una instalación interactiva de Eudald Ferré por la que el espectador que se acerque al Teatro Circo de Murcia conocerá a una ballena (manejada por un titiritero desde el interior) que planteará a los presentes un rompecabezas. Hay programados cinco pases: a las 12.00, a las 13.00, a las 17.00, a las 18.00 y a las 19.00 horas. Por otro lado, los italianos La Baracca presentarán en el Auditorio de Cabezo de Torres la obra merecedora ex aequo del Feten 2022 a Mejor Espectáculo Infantil, Una historia boca abajo, sobre dos personas con visiones muy diferentes de la vida y cuyo único lazo es un gato rojo que habita entre los pisos de ambos, y Teatro Los Clavales presentará en Algezares su última propuesta, La casita de chocolate, inspirada en la historia de Hansel y Gretel. Por último, el Teatro Vico de Jumilla acogerá a La Tendía y su obra La isla de las cosas perdidas, un trabajo que recuerda la importancia de preservar la memoria de quienes nos precedieron, de conocer su historia y llevarla con nosotros. Es, explican, «un espectáculo de objetos y títeres hechos con esparto, una fibra milenaria que habla de nuestros orígenes».