Fieles a la tradición, los miembros de la Compañía Cecilio Pineda regresarán este viernes al Teatro Romea, como llevan haciendo desde hace ya más de treinta años en torno al Día de Todos los Santos. Y lo harán, por supuesto, con un texto que el director Julio Navarro Albero y su equipo conocen a la perfección: Don Juan Tenorio, de José Zorrilla, cuya interpretación el 1 de noviembre forma ya parte desde hace décadas del folclore que acompaña a esta festividad. Sin embargo, y ante la elevada demanda que año tras año sufre la taquilla de este emblemático escenario, no será una, sino cinco las funciones que mantengan viva esta costumbre teatral en este 2022.

Las representaciones fueron presentadas esta mañana en el Salón de los Espejos del propio Romea, en un acto en el que participaron diferentes miembros de la compañía, encabezados por supuesto por Navarro Alberto -que volverá a dar vida al Don Juan-, así como el responsable del Área de Artes Escénicas del Ayuntamiento, Juan Pablo Soler, y el concejal de Cultura, Turismo y Deportes de Murcia, Pedro García Rex. De hecho, el edil quiso destacar ante los medios el "gran trabajo y la profesionalidad" de la Cecilio Pineda, así como animar a los murcianos a que respondan a la llamada del Tenorio, "tal y como vienen haciendo todos los años". Pues, para García Rex, éstas funciones se han convertido en los últimos años en "un acto social de reencuentro cultural". 

En lo que se refiere a la representación en sí, esta versión de la obra de Zorrilla cuenta con más de cuarenta actores en escena entre personajes principales, figuración, músicos y bailarines, "además de un gran equipo técnico". Todo ello, sobre una escenografía clásica a base de telones pintados a principios del siglo XX cuya ambientación ha quedado reforzada con una amplia gama de elementos de atrezo, ya sean réplicas de época o adquiridos en anticuarios. Hablamos por tanto de una puesta en escena muy cuidada que tiene como objetivo presentar, de nuevo, ante el público murciano, a Don Juan, un personaje de teatro convertido en leyenda; un hombre "enamoradizo, frívolo, burlón, fanfarrón y calavera ante una nueva apuesta que le llevará a tratar de seducir a la inocente novicia Doña Inés". 

El resultado es, para quien todavía no conozca este texto, "una historia de amor, honor, muerte y fantasmas escrita a mediados del siglo XIX y convertida hoy a uno de los grandes clásicos de la literatura y de la escena española"; de ahí el empeño en que nadie se quede sin disfrutar de esta representación, lo que se traduce en un buen puñado de funciones. La primera tendrá lugar, efectivamente, el próximo viernes a las 20.00 horas; misma hora que las previstas para el sábado 29 y el lunes 31, aprovechando que al día siguiente es festival. Y atendiendo precisamente a la jornada laboral de los días posteriores, las representaciones del domingo 30 y del propio martes, Día de Todos los Santos, comenzará una hora antes, a las 19.00 horas. El precio de las entradas, eso sí, es el mismo para los diferentes pases: de 12, 15 y 18 euros, según ubicación, y están a la venta tanto en taquilla como en www.teatroromea.es.

Fecha: Viernes, sábado y lunes, a las 20.00 horas; domingo y martes, a las 19.00 horas.

Lugar: Teatro Romea, Murcia.

Precio: 12/15/18 euros.

160 aniversario del Romea

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Como curiosidad, la representación del 'Tenorio' coincide esta semana con la celebración del aniversario del Teatro Romea. Mañana se cumplirán nada menos que 160 años desde la primera apertura de puertas este espacio (el 26 de octubre de 1862), que arrancó su andadura con música, con la sinfonía Los diamantes de la corona, y con una comedia, La cruz del matrimonio, con el propio Julián Romea como uno de los actores protagonistas. Llamado originalmente Teatro de los Infantes, el principal teatro de Murcia fue inaugurado por la reina Isabel II, y cuenta con una misteriosa historia que lo convierten en un lugar idóneo para acoger en la Noche de Difuntos una representación del Don Juan

Porque el Romea ha sufrido en su centenaria historia dos grandes incendios (en 1877 y 1899), ha sido sometido ampliaciones y rehabilitaciones de todo tipo y, sobre todo, ha sobrevivido a leyendas, maldiciones y, más recientemente, a una pandemia. El aspecto exterior actual corresponde a la reconstrucción realizada tras el primer incendio, mientras que el interior obedece a la gran intervención realizada a principios del siglo XX, para la que se contó con los pintores Antonio Latorre e Inocencio Medina Vera para decorar el techo. "Hoy en día el Teatro Romea continúa siendo uno de los principales y más bellos escenarios del país y, por supuesto, epicentro de la vida cultural en Murcia, gracias a una programación estable y de calidad", apuntó Pedro García Rex.