Un espectáculo para la vista, el olfato y el paladar, os lo aseguro. Este delicioso guiso está elaborado con tanto mimo y una cuidadosa elección de los ingredientes que resulta un placer desde el minuto uno. Cada cosa que se añade a la cazuela aumenta nuestras ganas de servir y disfrutar tan delicioso manjar.

INGREDIENTES

1 solomillo de cerdo, sal, pimienta negra molida, tomillo, 1 cebolla dulce, cáscara de 1 naranja, 50 ml. de vermú, 1 cucharada sopera de mermelada de pimientos, 300 ml. de caldo de carne, 3 cucharadas soperas de aceite de oliva, 3 dientes de ajo, medio kg. de albaricoques y romero fresco.

ELABORACIÓN

1. Salpimentamos el solomillo. Esperamos unos minutos para que coja la sal.

2. En una cazuela ponemos el aceite de oliva y los ajos fileteados y cocinamos a fuego lento para que suelten su sabor.

3. Retiramos los ajos y añadimos el solomillo, cocinando por todas sus caras hasta que se vea doradito. Retiramos y reservamos.

4. En el mismo aceite de dorar el solomillo ponemos la cebolla dulce cortada en pequeños daditos. Cocinamos a fuego lento removiendo para que no se tueste, un par de minutos.

5. Añadimos el vermú, la cáscara de naranja, la mermelada de pimientos , una cucharadita de tomillo, el romero fresco y sal al gusto. Dejamos cocinar un par de minutos.

6. Añadimos el solomillo que teníamos reservado y vertemos sobre él el caldo de carne. Tapamos la cazuela y dejamos cocinar a fuego medio hasta que pinchemos el solomillo y se vea tierno.

7. Añadimos a la cazuela los albaricoques bien lavados ( con piel, sin hueso ) y cortados a la mitad. Damos un nuevo hervor y retiramos del fuego. Servimos recién hecho espolvoreado con un poco de romero fresco.