Recuerda el profesor Díez de Revenga su entrada en la facultad de Letras de la Universidad de Murcia de hace ahora cuarenta años, cuando sus alumnos le recibieron con una fuerte ovación. Como lo recuerda también este cronista, ya que allí estábamos los dos. Como profesor el uno, como alumno el otro. Venía de Madrid, donde había obtenido la plaza de profesor adjunto. Corría el año 1978, y hacía diez años que, recién acabada la carrera, se había convertido, con 22, en el agregado de instituto más joven de España.
En 1963, cuando el joven Díez de Revenga comenzó su carrera, no tenía ni idea de que aquel pequeño campus sería el lugar donde desarrollaría su trabajo, sus investigaciones literarias, sus escritos, sus ponencias, durante los 55 años siguientes. Aún faltaba el edificio que alojaría su despacho durante décadas y que constituiría el lugar en el que escribiría buena parte de sus numerosos libros y cientos de artículos, y el sitio donde se convertiría en profesor de Literatura para miles de alumnos que, durante dos generaciones, han poblado las aulas en las que ha impartido clase.
Hizo la carrera con profesores muy sabios, como le gusta señalar: Mariano Baquero, Muñoz Cortés, Luis Rubio, Margarita Zielinski, Antonio de Hoyos, Juan Torres Fontes...
La literatura murciana tiene una deuda impagable con este profesor, que ha dedicado una buena parte de su trabajo a la investigación y la difusión de obras de escritores de la Región en un tiempo en que la investigación sobre escritores locales era despreciada.
Su trabajo en la Real Academia Alfonso X el Sabio ha sido importante, como lo ha sido su dedicación a la historia de nuestro pasado más cercano, que se ha plasmado en numerosos escritos rigurosos y amenos sobre historia de Murcia y de su universidad, que le valieron su nombramiento como Cronista de la Ciudad de Murcia.
Él fue el auspiciador, siendo vicerrector de Cultura, de los actos conmemorativos del 75 aniversario de la creación de la Universidad de Murcia, cuya exposición central confió a quien esto escribe.
«La Literatura es vida», afirma Díez de Revenga. Y la vida de este prfesor está hecha de letras. Él sabe y defiende que «cuanta más Literatura se lee, más vida se recibe, y se enriquece la nuestra».
