La undécima edición del Sombra, el Festival de Cine Fantástico Europeo de Murcia, arranca oficialmente esta noche en la Filmoteca con la proyección de la película Demons (1985), del veterano cineasta italiano Lamberto Bava, quien se encargará personalmente de presentar la película junto con la actriz Fabiola Toledo. Sin embargo, y aunque desde el pasado mes de febrero vienen sucediéndose las actividades paralelas a la programación principal, ayer se inauguró una exposición con la que la organización viene a dar el pistoletazo de salida definitivo a una intensa semana de cine –la clausura tendrá lugar el sábado 26– que tendrá en la Biblioteca Regional otro punto de asistencia obligatoria.
Y es que hasta el 11 de abril se podrá visitar en el recibidor del centro una muestra que reúne cerca de medio centenar de piezas relacionadas con la icónica saga Alien; una suerte homenaje al octavo pasajero y a sus creadores, Ridley Scott y H. R. Giger, que el Sombra presenta en primicia en Murcia. Así, en la Biblioteca se puede contemplar, por ejemplo, una cabeza a tamaño real del xenomorfo que diseñó el propio Giger. También una mano del sanguinario extraterrestre –utilizada en el filme original, de 1979–, un chaleco del marine Frost (interpretado por Ricco Ross) en Aliens: El regreso (1986) y una vasija utilizada durante el rodaje de Prometheus (2012), filme con el que Ridley Scott viajaba a los orígenes del personaje. Todas ellas forman parte de la colección privada de Luis Nostromo, creador del Museo de Alien en Barcelona.
«En el espacio nadie puede oír tus gritos»
Alien: el octavo pasajero (1979) es, para muchos, la obra maestra de Ridley Scott, y un filme que encaja a las mil maravillas con la filosofía del Sombra: «Es una película –explica la organización en una nota de prensa– que trasciende la barrera del tiempo para convertirse en la pura representación del cruce entre la ciencia ficción y el terror», los dos géneros por excelencia en torno a los que se articula esta cita. Y es que la muestra sirve también para repasar la historia de una franquicia que cambió las reglas del juego: «Llegó en una década en la que el género estaba en pleno auge, en la que grandes producciones como La guerra de las galaxias (1977) conquistaron al público mayoritario –recuerdan–. Y fue ahí, en un momento en el mundo del espectáculo comenzaba a mirar hacia las estrellas, atreviéndose a imaginar lo que hasta entonces era inimaginable (la fantasía, las innumerables criaturas, los planetas rebosantes de vida…), cuando apareció Ridley Scott para darle un giro aterrador a ese sueño y convertirlo en una pesadilla».
Situando gran parte de la acción en la ya legendaria nave Nostromo, priorizando los efectos prácticos y el ritmo pausado, Scott nos demostró lo que significaban cada una de las letras de la frase: «En el espacio nadie puede oír tus gritos». Gracias a un elenco espectacular, una técnica cinematográfica superlativa y a uno de los monstruos más terroríficos y mejor conseguidos del séptimo arte, Alien se ha posicionado como uno de los mejores ejercicios de terror psicológico jamás creados, y a su protagonista, la teniente Ellen Ripley interpretada por Sigourney Weaver, en una de las heroínas más icónicas del género.
