Las salas del Museo del Cristo de la Sangre y del Laboratorio de Arte del Carmen (LAC) acogen desde ayer y hasta el 25 de marzo la muestra Párraga, 25 años después, una exposición que rinde homenaje al maestro cartagenero, una de las figuras clave del arte de la Región de Murcia en el siglo XX y de cuyo fallecimiento se cumplen el próximo mes de abril 25 años.

La exposición, organizada por la Archicofradía del Cristo de la Sangre en colaboración con el Ayuntamiento de Murcia, fue inaugurada este martes por el alcalde, José Antonio Serrano, el concejal de Cultura, Turismo y Deportes, Pedro García Rex, que se pronunciaron acerca de esta muestra horas antes de que se abrieran las puertas del museo. «Esta efeméride ofrece la oportunidad de revisitar la obra de José María Párraga a través de un recorrido que abarca más de treinta años de trayectoria», explicó el primer edil, quien subrayó que en el LAC y el Museo del Cristo de la Sangre se exhiben obras realizadas con las diferentes técnicas que cultivó el cartagenero: dibujos, pinturas, collages y pirograbados. Además, Serrano incidió en que, «si fue grande el artista, también lo fue el hombre, porque Párraga fue muy popular, un personaje entrañable que inspiraba generosidad».

Para el responsable de Cultura, Turismo y Deportes, Pedro García Rex, «veinticinco años después de su adiós, no hay mejor homenaje que mostrar lo infinito de su obra». En este sentido, esperó que «especialmente las generaciones más jóvenes» se acerquen tanto al Museo de la Sangre como al LAC para «apreciar el arte de Párraga y, así, entre todos, seguir proyectando desde Murcia la riqueza creativa y el legado que nos dejó este magnífico pintor».

Mucha obra inédita

Como incentivo, la presente muestra se halla integrada por una mayoría de piezas hasta el momento inéditas, que amplían los límites conocidos del universo visual de Párraga. «Durante los primeros años de su producción, el artista se comportó como un auténtico ‘nómada estético’, cuya curiosidad insaciable le condujo a sostener en el tiempo una tensión creativa insobornable. Veinticinco años después de su fallecimiento, José María Párraga, lejos de ser una figura de la que poco nuevo cabe decir, constituye un apasionante desafío plagado de interrogantes», señalan los organizadores a este respecto.

De hecho, exponer semejante colección es posible gracias a la colaboración de varios particulares y coleccionistas, entre ellos la familia Ayala Martínez, Fray Francisco Pastor Valls, Enrique González Semitiel, Mariano Ruipérez y Maravillas Ruiz.