El Ayuntamiento de Murcia ha seleccionado un total de trece proyectos dentro de la línea de ‘Artes Escénicas’ del programa ‘Reactivos Culturales’; una iniciativa que, en su segunda edición, continúa apoyando a los artistas y creativos en la realización de proyectos originales e innovadores que contribuyan a fortalecer la cultura del municipio. Entre los elegidos, que ayer fueron presentados en el Teatro Circo y para los que se destinan un total de 75.000 euros, figuran espectáculos teatrales y de danza, propuestas musicales y también otras enfocadas a la educación y la mediación.

«Según las propias bases de la convocatoria, se ha dado prioridad a propuestas escénicas con un marcado carácter innovador y de investigación que, además, estén adaptadas para su exhibición en el circuito de teatros y auditorios municipales del municipio», indicó el concejal de Cultura, Turismo y Deportes, Pedro García Rex, quien felicitó a los artistas seleccionados. Además, todos los elegidos han presentado también una propuesta de contenidos digitales para su incorporación y difusión en la plataforma Oculto.tv.

Proyectos seleccionados

Entre las propuestas seleccionadas se encuentran varios montajes teatrales, como La cadena, de Mireia Hidalgo y Andrea Vargas, un proyecto de teatro relacional con el que se pretende crear un espacio escénico dedicado a las relaciones entre los espectadores. Los actores no existen y son ellos quienes deberán realizar lo que se les proponga, dando así a conocer el teatro relacional como un género que también muestra la realidad social a través de la experiencia del público.

Otro de los montajes subvencionados es En la orilla, de Cía. La Tendía (David Terol y Bárbara Vargas), un proyecto de teatro de objetos de pequeño-mediano formato que propone la utilización del esparto como material escénico. Es la historia de una isla a cuyas orillas van a parar todas las cosas que se pierden y finalmente se olvidan; un viaje a la memoria de las cosas perdidas.

Por su parte, Teatro Silfo presentó Los Magos de Oriente, un espectáculo teatral para el público infantil y familiar basado en la narración y las sombras chinescas. Una propuesta de pequeño formato que pretende ofrecer una nueva visión de las figuras de los Reyes Magos y en el que la tradición se mezcla con una puesta en escena fresca y atrevida.

En el listado que ha hecho público la Concejalía también aparece Yucón (la nieve arde), de Islandia (José Antonio Villegas y Ana Rivendel), un proyecto escénico que posee también una vertiente social, al acercarse a la realidad de la minería. Esta propuesta nace de la necesidad de desenterrar todo lo que está oculto y que permanece silenciado durante generaciones, conectando dos mundos muy diferentes (unidos por la destrucción de la mano del hombre) para lanzar un canto al cuidado del medio ambiente y al descanso de la memoria colectiva.

Y de la mano de Pablo Trasandes Cerón, a lo largo de los próximos meses se podrá estrenar la obra Van Gogh, Jesucristo y yo, un solo teatral que relaciona a los tres personajes que dan nombre a la obra (incluido su autor). Un proyecto que acerca la figura del pintor en relación a la espiritualidad y a su enfermedad. «¿Por qué a veces, aunque haya voluntad de no sufrir, cuesta tanto salir de allí? ¿Cómo alcanzar el no miedo a la muerte? ¿Cómo transmitir el aprendizaje espiritual propio en escena?». Estas son las preguntas que se lanzan a través de este montaje de cuyo equipo también forman parte el dramaturgo Juan Montoro Lara y el director de escena Joaquín Lisón.

Otros dos rostros muy conocidos y activos del teatro murciano, como son Luis Martínez Arasa y Luisma Soriano, presentaron la pieza Convertir en tragedia las imbecilidades, un proyecto de teatro contemporáneo en el que se mezcla realidad y ficción a través de la vida de un hombre de hoy en día que, tras un grave accidente, hace un recorrido personal con el público. Mientras que Yampo trabaja en ¡Mujer tenías que ser! (una historia del teatro español con nombre de mujer), una propuesta que centra el foco sobre los personajes femeninos más representativos y reconocibles de la literatura dramática. Todo ello «a través del clown, el teatro corporal, de diálogos ágiles, audiovisuales y música», aseguran.

Poesía, danza y música

Por otro lado, una de las piezas más innovadoras que se han planteado en esta edición es Nada hay puramente sin filtrar, de José Daniel Espejo, que lidera el desarrollo de un proyecto de poesía escénica multidisciplinar que reúne en escena la poesía ‘spoken word’, la música en directo (a cargo de Esther Eu) y una proyección de piezas cinematográficas y musicales mezcladas en vivo por el cineasta Joaquín Regadera.

La danza también es protagonista en esta selección de la mano de Murcianik, de la coreógrafa y bailarina Hortensia Laencina. Se trata de una propuesta que pretende mostrar la situación de la mujer en la sociedad desde la perspectiva de las huertanas, de las mujeres murcianas. Un proyecto en el que colaborarán la DJ Carrie Palmer; la diseñadora de moda África Hernández, que creará un vestuario basado en la estética huertana, con aires renovados y reivindicativos, y la fotógrafa Andrea Glez. Y en el apartado musical destaca la cuarta edición del festival De la Raíz al Noise, de la Asociación Artística Forzar Salida (AADK Spain), que hasta ahora se celebraba en Blanca con artistas locales, nacionales e internacionales.

Por último, son tres proyectos los que se centran en la educación y la mediación: Teatrápame: Barrios, de Aye Cultura Social, dirigido a poner en marcha un proceso de creación escénica comunitaria en zonas como Los Rosales (El Palmar), el Polígono de La Paz y el barrio de La Fama; Rumbo a Farout, de Onírica Mecánica, una ficción especulativa sobre la llegada del hombre al planeta más lejano del Sistema Solar para su colonización, y, para terminar, Territorio Cachorro, de Nacho Vilar Producciones, un programa de formación y asesoramiento a compañías emergentes de artes escénicas residentes en la Región.