La veterana actriz barcelonesa Vicky Peña se enfrentará mañana sobre las tablas del Teatro Romea de Murcia (18.00 horas), no a un solo personaje, sino a muchos, en la primera adaptación en España de la novela de Juan Rulfo Pedro Páramo. Y es que la intérprete catalana encarna en este montaje a todas las mujeres de esta historia, y también al arriero Abundio en su primer encuentro con Juan Preciado, en su llegada al pueblo.

Sin embargo, entre personaje y personaje, asegura que no se realiza ningún tipo de transición formal. «Contamos con la capacidad del espectador para seguir nuestro juego», explica Peña. «Mario Gas, el director, cuando empezamos a ensayar, nos llamaba mucho a establecer esa especie de complicidad que se ejerce entre los niños pequeños cuando se ponen a jugar y representan distintos personajes», apunta la actriz, que, eso sí, confiesa que, «evidentemente», hay variaciones en la voz o en la manera de andar para parte de los actores que facilitan la distinción de los mismos; «e incluso también se les nombra en algunos momentos», indica.

En cualquier caso, «son todos unos personajes bien atrabiliarios, bien surrealistas y muy abstractos. Nunca sabemos si están vivos o están muertos –añade Peña–; no sabemos desde dónde nos hablan. Es una galería de personajes muy extraña y a la vez con unas personalidades muy marcadas», asegura la actriz, que estará acompañada sobre el escenario por otro peso pesado del teatro español actual: Pablo Derqui.

La trama, para el que no la conozca, gira en torno a un hombre humilde, Pedro Páramo, que llega a convertirse en el cacique de su pueblo, Comala, una aldea que él exprimirá y arrasará hasta convertirla en un pueblo fantasma. Allí llega, años después, su hijo –él ya citado Juan Preciado–, que se cruzará con los fantasmas de sus habitantes y descubrirá así quién era realmente su padre y cómo se aprovechó de los habitantes del pueblo, incluyendo su madre.

En este sentido, la ciudad fantasmal de Comala se representa en esta pieza a través de la adaptación que ha hecho Pau Miró de los momentos que ha ido escogiendo de la novela original. «Todo esto ha de tener una concreción formal que se consigue a partir de un aspecto visual más allá de la narración», apunta la actriz catalana, que hace alusión a la escenografía de Sebastià Brosa, «quien ha realizado una síntesis formal sugestiva, sugerente, abstracta, pero practicable», señala. «Además, va acompañado de unas proyecciones visuales de Álvaro Luna que crean un ambiente visual y estético muy potente. Todo ello muy sugerente y convocando siempre la imaginación y la complicidad del espectador y contando con que se deje llevar por esa fantástica narración de Juan Rulfo».

Comparación

Para Peña no es posible establecer una comparación entre el momento actual pandémico y ese mundo poético y denso del autor. «No lo equiparo, aunque ahora vivamos momentos surrealistas y extraños. La poética y la riqueza de Rulfo tienen una personalidad muy propia». La actriz tampoco cree que haya que hacer paralelismos del cacique Pedro Páramo con nuestra realidad. «Atiende a otra textura y a otro mundo, y no hay transposición al ahora. El tipo de cacique que representa Pedro Páramo es un cacique que podría encontrarse a lo mejor en algunas narraciones de Valle- Inclán, pero no responde al ahora». «Siempre ha habido gente que ha abusado del poder a través del dinero o de la corrupción, pero una figura tan siniestra como Pedro Páramo», dice.

¿Cuándo? Mañana, 18.00 horas ¿Dónde? Teatro Romea, Murcia ¿Precio? 15/18/22 euros