La caravaqueña María del Mar Mallorquín acaba de lanzarse al mundo literario con su primer trabajo, Los trajo la marea, un apasionante thriller forjado durante una aventura de seis años en Australia y que cuenta con algunos de los parajes mas cautivadores de Sídney como telón fondo. Sin embargo, en su empeño por que este relato viera la luz también ha iniciado un proyecto paralelo Ediciones La Trovadora, con la que ha ‘parido’ este debut, que cuenta con ilustraciones de Pedro Hurtado.

En Los trajo la marea, Mallorquín une su faceta como historiadora y su gran amor por el país oceánico, así como su pasión por las novelas de misterio sobrenatural. «El lector no podrá dejar de tirar de los extraños hilos que desde el principio tejerán el destino que James Johnson y Adrienne –sus protagonistas– terminarán compartiendo», asegura.

Acaba de publicar Los trajo la marea, un libro en el que entrelaza su faceta como historiadora con su amor por Australia y las novelas de misterio.

Es una mezcla de todo, sí. ¡Pero era inevitable! Yo estuve viviendo casi seis años en Australia, y fue allí donde escribí este libro; además, todo esto sucede mientras estoy estudiando Historia (aunque realmente soy traductora). Pero bueno, todo comenzó un día dando un paseo por un lugar histórico de Sídney: me encontré con un faro que me cautivó, así que me puse a investigar sobre aquel lugar y de ahí comenzaron a venirme ideas a la cabeza; así empecé a componer la novela. La idea al principio es que fuese una novela con tintes eróticos, pero poco a poco empezaron a suceder cosas oscuras, a morir personas… Al final, Los trajo la marea se convirtió en un thriller, básicamente; en novela negra pura y dura.

Está ambientada en dos épocas diferentes: mediados del siglo XIX (en concreto, en el año 1857) y la ‘actualidad’: 2019.

La época antigua tiene que ver con el faro del que te hablaba, en cuya costa tuvo lugar, en 1857, un gran naufragio que es considerado, a día de hoy, la mayor tragedia marítima en la historia de Australia. Y, por otro lado, estamos en 2019 que es cuando yo escribo la novela. En ese momento se comienzan a hilar cabos...

Para la edición ha contado con las ilustraciones de Pedro Hurtado. ¿Cómo se han coordinado para realizar este trabajo?

La verdad es que ha sido un proceso muy bonito. Conocí a Pedro tras participar en un proyecto de ‘crowdfunding’ que emprendió para poder sacar adelante un proyecto que tenía él de un libro ilustrado, así que cuando decidí que mi historia también sería ilustrada me puse en contacto con él. Me gusta mucho su estilo, así que le propuse embarcarse a su manera en Los trajo la marea. Y yo realmente lo único que hice fue mandarle fotos de los lugares reales donde transcurre la historia, así como alguna idea, gestos, indicaciones –si quería una ilustración más activa o más pasiva, por ejemplo–, y él ya empezó a crear. Ha realizado una serie de láminas que, la verdad, son una auténtica pasada.

Por cierto, ¿cómo ha sido la experiencia por tierras australianas?

Pues ha sido un viaje muy interesante. Al final, después de cinco años y medio, Sídney –que era la ciudad donde vivía– se siente un poco como ‘mi casa’, pero al final las raíces tiran, y están en España, en el Sur, y es muy difícil vivir tan lejos de tu familia, de tus amigos y de todo lo que sucede a su alrededor... Realmente es un poco como vivir ‘aislada’ en la otra parte del mundo. Me llevo un buen recuerdo y un saco lleno de aventuras, pero ahora toca centrarse en esta nueva etapa.

Además de embarcarse en el mundo de la literatura con este primer trabajo como escritora, también lo hace como editora, a través de Ediciones La Trovadora.

Es que yo soy muy bibliófila. Desde siempre me han encantado los libros; son el amor de mi vida. Y a base de leer libros y de coleccionarlos, te vas quedando con los autores que te gustan, pero también ilustradores, tipos de tapas..., incluso con los olores de cada tipo de papel. Así que hacer de editora era algo que también me apetecía. Descubres otros procesos como seleccionar y trabajar con el corrector (que era algo que nunca había hecho y que ha sido una pasada), trabajas en el diseño de un proceso comercial alrededor de un libro..., es otro aspecto de la literatura que no conocía y que me ha fascinado. En definitiva, quería que mi libro tuviera, independientemente del texto, un formato bonito, como yo quería y con las condiciones que a mí me gustaría que tuviese el libro como escritora. Y de ahí nace Ediciones La Trovadora. Es un poco una forma de honrar a los grandes trovadores antiguos, que contaban las historias y en los que se basa un poco la tradición popular europea. De momento está siendo una aventura muy bonita.

Aunque vivimos tiempos complicados y de mucha incertidumbre, ¿tiene alguna fecha de presentación? ¿Y dónde podemos encontrar el libro?

Con respecto a las presentaciones, todavía no tengo una fecha porque, aunque cuando levanten el confinamiento dejarán realizar este tipo de presentaciones con limitaciones de aforo, sigue sin parecerme muy seguro juntarse, aunque sea un número reducido de personas, en un espacio cerrado. Espero que con la llegada del buen tiempo –para primavera y verano– pueda realizar algún acto con público al aire libre. En principio, esa es la idea de las presentaciones. Por otro lado, los libros ya se pueden encontrar en todas las librerías de Caravaca, y cada semana vamos ampliando la red, empezando por el Noroeste y siguiendo por toda la Región de Murcia.