El Ayuntamiento de Murcia sigue trabajando para «contribuir a la consolidación y el crecimiento del tejido artístico y creativo» de la ciudad, y dentro de este proyecta se enmarca el programa ‘Tubos de Ensayo’, anunciando hace un par de semanas pero no presentado hasta ayer. A grandes rasgos, se trata de una convocatoria de residencias de investigación y producción cultural para creadores y colectivos a los que se cederán algunos de los espacios gestionados por la Concejalía en el municipio.

Así, esta convocatoria, dirigida al talento creativo de Murcia –aunque tiene vocación nacional e internacional–, busca propuestas de cualquier disciplina artística: ya sean artes escénicas, plásticas y visuales; poesía y narrativa literaria, u otras ramas tradicionales de la cultura como la música o, incluso, la gastronomía, así como proyectos de innovación urbana, educación y mediación, tradición y folklore... También se acogerán propuestas basadas en la investigación, publicación, catalogación y recopilación, siempre y cuando se justifique el interés del proyecto dentro de la filosofía de la convocatoria, cuyas bases pueden consultarse en www.murciacultura.es.

Los seleccionados tendrán un plazo máximo de seis meses y 2.500 euros para desarrollar su proyecto

En esta misma web, los artistas, compañías, organizaciones o asociaciones interesadas podrán presentar sus candidaturas a estas becas, cuyas residencias de trabajo serán de un máximo de seis meses y tendrán un marcado «carácter experimental y de innovación», aceptándose propuestas en diferentes estados de conceptualización y desarrollo. «A diferencia del formato de residencia tradicional, ‘Tubos de Ensayo’ permite testar ideas y prototipos de propuestas innovadoras en el campo de la cultura, especialmente aquellas que puedan ser escalables, replicables o exportables», apuntan desde el consistorio.

Para los seleccionados, el Ayuntamiento de Murcia aportará recursos espaciales, técnicos y humanos para cada proyecto, según disponibilidad y horario. En concreto, los artistas contarán con un espacio de co-working equipado con Wi-Fi, mobiliario, iluminación y electricidad; asistencia técnica y recursos a concretar en la propuesta; material y equipo de creación audiovisual; bibliografía especializada en los campos de Arte Sonoro y Producción Audiovisual del SONM Archive, y espacio de consulta y estudio; mentorización y asesoramiento durante el desarrollo del proyecto, y, por último, hasta un máximo de 2.500 euros en concepto de producción, incluyendo gastos ocasionados por desplazamientos, alojamiento y manutención del artista o colectivo.

Por supuesto, los proyectos deberán ser originales e inéditos, y el comité evaluador, presidido por el concejal de Cultura, Jesús Pacheco, seleccionará «tantos como se considere viable en función del presupuesto». Para ello, se valorarán distintos aspectos como el desarrollo artístico; los valores tecnológicos y educativos; la investigación y catalogación; los procesos participativos y para la formación ciudadana; la digitalización (proyectos que se basen en medios audiovisuales u ofrezcan adaptaciones digitales dado el contexto de crisis global y la incertidumbre sobre la celebración de eventos tradicionales); criterios de igualdad, género e inclusión social, etc. «Queremos asumir el reto de que se produzcan, a través de este programa abierto y permanente en el tiempo, las condiciones idóneas para promover tanto la producción como la difusión de la creación y la cultura contemporánea», apuntó este martes el edil.