La Fundación Contemporánea desveló este martes los resultados del Observatorio de la Cultura más difícil de los últimos años: el de 2020, el de la pandemia. Y los resultados, como se podría prever, no son en absoluto positivos... Pérdidas de ingresos que de media se acercan al 30%, reducciones de plantilla y ERTE, actividad paralizada o bajo mínimos en un 70% de los casos..., ni siquiera sus esperadas ‘Insignias Culturales’, que reconocen a lo mejor del año en cada comunidad, se han salvado de la covid-19.

Y es que las listas están marcadas por las ausencias. En el caso de la Región, festivales como La Mar de Músicas o los festivales de Jazz y Teatro, Música y Danza de San Javier, que acostumbraban a copar las primeras posiciones, este año han causado baja por culpa del dichoso virus; una situación que ha ‘aprovechado’ el Teatro Circo de Murcia para hacerse con el primer puesto a nivel autonómico. En concreto, el TCM -que estuvo peleando durante todo el año por mantener su actividad y programación incluso a pesar de las reducciones de aforo-, se impone con el 45,5% de los votos.

Además de la escalada del Teatro Circo de Murcia –en el Observatorio de 2019 figuraba en cuarta posición–, la novedad destacada de esta edición es el segundo lugar de la Iglesia de San Esteban, que volvió a abrir sus puertas poco antes de que se decretara el estado de alarma para acoger la exposición Solana y la modernidad otra. Por otro lado, la Filmoteca Regional, el Auditorio Víctor Villegas y el Festival Internacional de Teatro de Molina de Segura empatan en el tercer cajón de la tabla con un 31,8% de los votos. 

Completan las primeras posiciones el Plan CREA del ICA para el apoyo del sector de las industrias culturales y creativas; el Centro Párraga de Murcia, referencia del arte contemporáneo; el Museo de Teatro Romano de Cratagena, y el Museo de Bellas Artes de la capital del Segura, el Mubam. El listado de 15 espacios o eventos lo cierran el Teatro Romea; El Batel de Cartagena; el ciclo de conciertos en streaming ‘Frecuencia RM’; la programación de las ‘Noches al raso’, del pasado verano; el Cuartel de Artillería y con el museo de T20 –segundo premio para la galería en este Observatorio, ya que es también responsable de la exposición de José Gutiérrez Solana–, y, por último, la agenda ‘Cartagena es Cultura’.

Lo mejor de la cultura en la Región de Murcia durante el año 2020. Fundación Contemporánea

En el ranking nacional, no obstante, no hay ninguna propuesta de la Región. En esta tabla, los museos de El Prado y el Reina Sofía, de Madrid, y el Guggenheim, en Bilbao, repiten el podio del Observatorio de la Cultura de 2019.

El efecto de la covid-19

No obstante, y como se avanzaba al inicio de este texto, el Observatorio de la Cultura 2020 arroja datos bastante preocupantes para el sector. De los cerca de 500 profesionales encuestados de todo el país, solo un 32% había recuperado en diciembre su volumen normal de actividad, mientras un 8% seguía sin ninguna actividad; por supuesto, el 81% contaba hoy con menos público que antes de que se anunciara el estado de alarma debido a las restricciones de movilidad y aforo, pero además, un 19% percibe una menor respuesta de la gente a sus propuestas.

En vistas de estos datos, no resulta extraño que un 37% de los miembros del panel del Observatorio de la Cultura afirme que aún parte de su plantilla se encuentra sometida a un ERTE, mientras el 59% reconoce haber recurrido a los despidos y un 10% de los profesionales independientes declaran haber perdido ellos mismos su empleo. En cuanto a los ingresos, de media el sector ha perdido en 2020 el 29% de lo presupuestado hace un año; una caída que es sensiblemente mayor en el sector privado (35%) y los profesionales independientes (38%), mientras que en el sector público se queda en un 22%. Tan solo el 14,9% del sector privado ha conseguido mantener sus ingresos, mientras para un 45% las caídas han sido superiores al 40%.

Estos datos, unidos a la incertidumbre en la que se encuentra sumergida la práctica totalidad del sector –los mas optimistas hablan de una vuelta lenta y progresiva a la normalidad solo a partir del verano–, hacen que la previsión para 2021 sea poco halagüeña. De media, se espera que los ingresos vuelvan a disminuir respecto a los reales de 2020 en un 7,7% (5% en el sector público, 9,3% en el privado y 15,1% entre los profesionales independientes), mientras que si lo comparamos con el presupuesto inicial de 2020, esto supondría un descenso en 2021 del 34,5% (26,2% en el sector público, 41,1% en el privado y 46,9% para los independientes).