En octubre de 2010 se inauguraba la Fonoteca de Música Experimental y Arte Sonoro SONM de Murcia con una instalación sonora inmersiva de Francisco López: Cámara de inmersión sónica, que exploraba “las posibilidades reveladoras de la deprivación sensorial. Sin ningún componente visible". Coincidiendo con el décimo aniversario de esta Fonoteca, se han programado diversas actividades de aquí a final de año que empiezan este viernes 6 de noviembre con el concierto de los artistas murcianos Lilith y Salva Alambre en el Pabellón 1 (segunda planta) del Cuartel de Artillería a partir de las 19.30 horas (aforo limitado a 30 personas).

Lilith -aka Selu Herraiz-, es un lunático ser andrógino que genera sesiones de audiopuntura para liberar emociones y proclamar el amor universal. Combinando ruidos, samples, grabaciones de campo y voces del otro lado, crea un canal directo para entrar en contacto con el espacio exterior. Músico con más de diez años de trayectoria, ha transitado por disciplinas como la fotografía, las artes plásticas, la escritura, el arte urbano o sonoro, y es uno de los 'Reactivos culturales' promovidos por el Ayuntamiento de Murcia tras la irrupción de la covid-19. Ahora se encuentra inmerso en la creación de un sello discográfico on line, Aldarrax, que recogerá las creaciones sonoras de la comunidad creativa en Blanca.

Salva Alambre es un músico inquieto que, tras pasar por proyectos como Electrowendy y Los Alambres, hace un par de años se lanzó en solitario con Matemática ingenua, un trabajo en el que condensaba y extractaba su estilo, heredero de la psicodelia sesentera. En Electromagnetismo, su último trabajo, Alambre ha dado prioridad a sintetizadores analógicos y ecos de cinta, aunque también hay samplers, cajas de ruido, un piano ocasional y alguna que otra guitarra. Pero más allá del frecuente uso del micrófono electromagnético o del theremin, la fuerza que da título al disco está indirectamente presente en lo lírico.