Esta noche nace por fin en Los Alcázares el Live Mar Menor, microfestival de verano en tiempos de coronavirus. La música en vivo (emplea a más de 300.000 personas) es uno de los sectores que, pese a las medidas de seguridad (distanciamiento social, limitaciones de aforo, etc.), más difícil está teniendo lo de alcanzar la llamada «nueva normalidad». Por ello resulta absolutamente heroica la actitud del Ayuntamiento de la localidad costera montando un evento de nuevo cuño, Live Mar Menor, apoyado por la iniciativa Crea-Noches Al Raso, patrocinado por el ICA y que se celebrará en el Centro Deportivo Municipal con tres bandas cartageneras de la hiperactiva escudería Son Buenos: Ayoho, Arde Bogotá y Nunatak, a los que acompañará la DJ Jutxa Ródenas.

Con tantas cancelaciones y prohibiciones, este concierto se presenta como una de las primeras oportunidades para poder disfrutar nuevamente de la música en vivo; tanto para el público como para las bandas. Por eso, antes de que vuelvan a subirse a los escenarios, reunimos a Antonio García (Arde Bogotá), Fran Vicente (Ayoho) y Pedro Hernández (Nunatak) para que nos hablen del momento que están viviendo, de los enormes perjuicios que la pandemia está causando al desarrollo de sus respectivas carreras, y de cómo están afrontando esta «nueva normalidad», que para este último es bastante peor en todos los aspectos que la vieja: «A unos sectores perjudica más que a otros, y quizás el nuestro sea de los más tocados por la pandemia. Todos los festivales cancelados, un verano casi en blanco en lo que a directos se refiere... Pese a ello tenemos mucha ilusión por hacer música; es un fuego que nunca se apaga, y encuentra su camino para seguir encendido independientemente de las circunstancias», asegura el teclista de Nunatak.

Por su parte, Fran, vocalista de Ayoho, opina que «detrás de las mascarillas se adivina alivio por volver a escuchar música en directo», y que «los organizadores de eventos están haciendo las cosas bien salvo excepciones que ni siquiera merece la pena resaltar, porque no es representativo de lo que supone ir a un concierto ahora mismo. Tenemos que ayudar a que la gente sea responsable en el show, y lo está siendo», insiste. En cuanto a Arde Bogotá, Antonio García, su guitarra y vocalista, considera que con esto de la nueva normalidad han vivido «algunas oportunidades y algunas decepciones: conciertos con el público sentado, cancelaciones..., pero también eventos nuevos y una buena respuesta de la gente. Somos optimistas, nos sentimos fuertes», sentencia el músico.

Seguirá habiendo música

Pero ¿cuál es la visión que tienen estos tres grupos sobre el momento que está atravesando el sector de la música en la actualidad? ¿Hay motivos para la esperanza? Para Pedro, a pesar de que el sector es probablemente uno de los más tocados, «es muy inspirador ver cómo la gente de la industria y los grupos se las ingenian para seguir produciendo material y ofreciendo música en directo», y considera que «motivos para la esperanza siempre hay, porque, al fin y al cabo, música y arte en general se seguirá consumiendo siempre. Habrá que reinventarse y seguir, sí, pero como en todos los aspectos de la vida». A Francisco (Ayoho) tampoco le arredra esta situación: «Han cambiado las reglas del juego, eso es así. Estamos explorando qué ventajas y desventajas tienen estos cambios, que son diferentes según lo grande que seas. Nosotros mordemos la navaja y vamos a la lucha como siempre». Por último, Antonio (Arde Bogotá) recuerda que, cuando se pudo volver a ver música en directo, el público respondió, «y muchos aforos se han quedado pequeños para las ganas que tiene la gente de conciertos. En esta normalidad o en la siguiente la gente seguirá queriendo disfrutar de la música, por lo que, si los promotores y artistas aguantan, seguirá habiendo industria en el futuro».

Tanto Nunatak como Ayoho y Arde Bogotá ya han tenido la oportunidad de tocar con público, pero ahora lo van a hacer juntos en el marco de un festival. ¿Cambia mucho la película? Pedro (Nunatak) lo ve como una experiencia 'nueva': «Tocar con las medidas actuales es diferente, pero también se disfruta. Puede resultar raro al principio, pero lo importante es sentir que la gente que tienes delante está ahí porque quiere escucharte». Y este concierto es especial para ellos porque es el primero al completo, en eléctrico y con todo el equipo: «Tenemos al teclista tullido, con un talón y una clavícula rota, motivadísimo para tocar, así que eso puede dar una idea de las ganas que hay de subirse al escenario». Para Fran (Ayoho), «los festivales son droga dura. Nos flipan, nos encantan, nos apasionan -dice-. Y más como artistas. Si sumas que compartimos cartel con amigos de toda la vida, la cosa también mejora». Por ello, confiesa que la banda ha preparado este show con mimo, especialmente «porque hay canciones nuevas que mostrar». Para Antonio (Arde Bogotá) la principal diferencia con un concierto individual es que «compartes público con el resto de las bandas, y hay gente que no conoce tu música y te la tienes que ganar de una forma distinta».

En este sentido, los tres grupos forman parte de la misma escudería, Son Buenos, pero ¿qué les hace diferentes? Fran asegura que, «en una pelea a muerte», Ayoho ganaría porque ellos son «más grandes y fuertes». Pero, bromas aparte, opina que «musicalmente cada uno hace lo suyo. La epicidad de Nunatak, el rock de los bogoteiros y el laboratorio urbano de Ayoho suenan a planazo de jueves».

Sin duda es un gran plan esta cita del Live Mar Menor, pero ¿en qué andan metidos los tres grupos en estos momentos? Pedro revela que ya están trabajando en un nuevo disco: «Dada la situación actual y la falta de directos, estamos volcados en la producción de un nuevo disco. Tenemos muchas ganas, y componiendo desde la sinceridad, la libertad y la voluntad de hacer la música que más nos apetezca hacer en este momento». Ayoho también se sienten muy motivados: «Estamos haciendo el mejor disco de nuestras vidas. Estamos en ese proceso de sana neurosis en el que construimos, deconstruimos y mimamos hasta que el cristal se pule. Vamos a por todas». Por su parte, Arde Bogotá admiten que llevan todo el verano sin parar de trabajar en el que va a ser su primer LP: «Después del concierto de Los Alcázares entramos a grabarlo».

Con ganas se plantean el futuro y esta primera edición del Live Mar Menor, que tendrá lugar en un escenario grande con pantallas y que permitirá escuchar el repertorio de estas tres bandas en eléctrico con toda la artillería. Además, como ellos mismos han reconocido, se estrenarán canciones nuevas que irán a parar a futuros discos; vamos, un privilegio tal y como están las cosas.