El director madrileño Carlos Vermut acaba de terminar el rodaje de su tercer largometraje, un filme cercano al melodrama -aunque de difícil catalogación- que lleva por título Quién te cantará y cuyo estreno está previsto para 2018, según avanzó ayer el cineasta durante un encuentro con los medios.

Después de Diamond flash (2011) y Magical girl (2014), película con la que consiguió la Concha de Oro en el Festival de San Sebastián en 2014, Vermut regresa con un presupuesto más holgado, de dos millones de euros, y una propuesta que versa sobre la identidad y que protagonizan la actriz y cantante Najwa Nimri y la murciana Eva Llorach, que repite una vez más con el realizador madrileño.

Tal y como relataron Vermut y Enrique López, coproductor de la película, el filme narra la historia de Lila (Nimri), una cantante que padece amnesia tras un accidente y que no reconoce sus canciones, por lo que busca a una imitadora para que se convierta en ella misma. Es aquí donde entra Llorach, que interpreta a Violeta, quien intentará a su manera ayudar al personaje de la polifacética cantautora de origen jordano.

Según Vermut, que cuenta también en el cast con Carme Elías y Natalia de Molina, este juego de espejos e identidades guarda un poso de su propia experiencia tras leerse en entrevistas, así como de la propia admiración que siente por cineastas como Almodóvar o Fassbinder. No obstante, el joven cineasta indicó que la referencia más directa de Quién te cantará es el manga Detroit metal city, protagonizado por un joven amante del pop que termina como líder de un grupo de death metal, una «lucha interna» entre lo que mejor hace y lo que en realidad desea hacer.

Vermut explicó que en esta cinta, además de explorar temas como la identidad y la imagen, hay también un trasfondo de crítica social que no es intencionado pero sí «inevitable», puesto que se habla de «clases», de una «relación de poder» y, en definitiva, de «ética». En este sentido, ha explicado que, además, este vínculo es «peor» que el que presenta Magical girl: frente a la «transferencia económica» de su anterior cinta, en esta ocasión propone una cesión «espiritual» y, por ello, puede ser «más político».

En cuanto a la estética de Quién te cantará, que se lanzará en Netflix apenas medio año después de su estreno en cine, Vermut señaló que se acerca más a Diamond flash, porque es «rosácea» y «dorada», a diferencia de la apariencia «grisácea» de Magical girl, lo que le aporta también un «rollo más onírico» a la película.

Preguntado por sus planes de cara a la puesta de largo del filme en 2018 y su intención de presentar la película en Cannes o la Berlinale, Vermut aseguró que le gustaría mucho que se presentara en alguno de los dos, aunque admitió que, por sus experiencias previas, un festival de este calibre «apetece mucho hasta que no te cogen». Al fin y al cabo es un premio que deciden entre «cinco o seis personas», dijo, y su deseo actualmente es hacer películas que la gente vaya a ver. «Los festivales no dejan de ser una performance», declaró.