El Museo Arqueológico de Murcia muestra desde hoy una pieza de mármol de un sarcófago de la primera mitad del siglo IV hallada recientemente en Bigastri (Cehegín), y calificada como "extraordinaria" por su alcalde, José Soria, y de suma importancia para la historia del cristianismo, según el arqueólogo Francisco Peñalver.

A unos tres kilómetros de Cehegín se encuentra el yacimiento arqueológico que con éste suma ya tres sarcófagos hallados en veinte años, desde los primeros trabajos realizados por Antonino González Blanco, si bien éste es de suma importancia porque es "el mas espectacular", según Peñalver.

Se trata de la figura de Adán en el momento en el que fue culpabilizado, aunque la figura del árbol, la serpiente y Eva no se encuentran en la pieza hallada porque estas piezas fueron fragmentadas en la fase de abandono de aquella sede episcopal visigótica amurallada.

Al parecer su obispo habría adquirido en Roma esta costosa pieza, cuyo mármol es de la misma cantera que utilizó Miguel Ángel, siendo transportada en una Galera posiblemente a Cartagena y desde allí en carro hasta Begastri, cuya elite social se supone que apreciaría esta obra religiosa, de la que existe otra similar en el Huerto de San Rafael (Córdoba).

El alcalde de Cehegín indicó que la excavación es "floreciente y viva", y que se trata de una pieza que dará mucho que hablar, mientras que Peñalver indicó que se encontró en una torre de 17 metros de lado, donde fueron hallados siete fragmentos mas.

El arqueólogo José Antonio Molina dijo que se trata de un hallazgo muy importante para el cristianismo primitivo de la Península Ibérica, con valores formales que tendrán repercusión en la investigación del mundo cristiano antiguo.

Molina señaló que el Adán que aparece en el fragmento recuerda a Adonis, y que además se puedes ver trozos de nariz, barbilla y labios de un ángel, el que lo expulsa del Paraíso, y que lo desnuda, de ahí que Adán se muestre tapando sus partes y asustado.

Agregó que el hallazgo "ratifica lo que sabían" sobre Begastri, de sus orígenes episcopales muy antiguos, y de la importancia que tenía la ciudad demostrada por el interés implícito en pagar e importar esta obra desde Roma.

Se trata de un tema clásico de la historia de la iconografía del cristianismo de esa época en la que se mostraba a Adán como anuncio con su pecado de la renovación de la promesa, afirmó Molina.

El director general de Bellas Artes y Bienes Culturales, Enrique Ujaldón, indicó que la pieza estará mes y medio en el museo de Arqueología, y que este hallazgo es un ejemplo de cómo se devuelve a la sociedad el trabajo que a diario se realiza en este tipo de excavaciones.

Por otra parte, y preguntado por la posible importancia de los trabajos arqueológicos en el jardín de San Esteban previos a la construcción de un aparcamiento subterráneo, respondió que la Dirección General supervisa esos trabajos y que por el momento no ha aparecido ninguna pieza importante en el barrio árabe descubierto, y que su importancia radica en su extensión.