Esta cinta se impuso en la sección oficial del certamen, que comenzó el pasado 15 de marzo, sobre más de sesenta largometrajes de Alemania, Argentina, Brasil, Canadá, China (incluido Hong Kong), Chile, Colombia, Cuba, España, Estados Unidos, Finlandia, Francia, Islandia, Israel, Italia, Japón, Portugal, Reino Unido, Rumanía y Turquía.

Maddin ofrece en este filme, en blanco y negro, su particular visión de la ciudad canadiense de Winnipeg, mezclando material de archivo documental y grabaciones de ficción.

"Medusas", de los directores israelíes Shira Geffen y Etgar Keret, y "Estómago", del brasileño Marcos Jorge, recibieron los premios de mejor ópera prima y mejor película iberoamericana, respectivamente.

El fallo del jurado destacó, por su "especial calidad artística", al filme mexicano "La luz silenciosa", de Carlos Reygadas, que consiguió también la distinción como mejor película iberoamericana por parte de la Federación Internacional de Críticos Cinematográficos (FIPRESCI).

En la sección documental, resultaron triunfadoras las cintas "Milton Santos: o mundo global visto do lado de cá" (Milton Santos: el mundo global visto desde acá), del brasileño Silvio Tendler, y "Balkan Rhapsodies: Serbia y Kosovo" (Rapsodias balcánicas: Serbia y Kosovo), del estadounidense Jeff Daniel Silva.

El director de la Cinemateca Uruguaya, Manuel Martínez Carril, expresó en la ceremonia de clausura su satisfacción por las "decenas de miles de espectadores" que acudieron al cine durante las dos semanas que duró del certamen.

"Hemos apostado por un cine de expresión que difícilmente llegará a las pantallas comerciales", aseguró Carril, para quien este festival es un "lugar de encuentro" y "reconocimiento" de los "valores del cine internacional".

El mexicano Juan Mora Catlett; los argentinos Pablo Bardauil, Franco Verdoia y Rodrigo Espina; los brasileños Paulo Nascimento, Silvio Tendler y Paula Gaitán; los colombianos Harold Trompetero y Juan Zapata; el finlandés Petri Kotwicka y los italianos Andrea Foschi y Marco Neri, son algunos de los representantes extranjeros que han defendido con su presencia sus propuestas fílmicas.

La Cinemateca Uruguaya, una asociación civil fundada en 1952, organiza anualmente este certamen cinematográfico, que en esta edición salió de Montevideo para proyectar algunas de las películas participantes en localidades del interior del país como Salto, Paysandú, Mercedes y San José.

El estreno, tras la lectura del fallo del jurado, de la película uruguaya "Polvo nuestro que estás en los cielos", de la realizadora Beatriz Flores Silva, sirvió de broche final a dos intensas semanas de cine, en las que se proyectaron alrededor de 300 largometrajes, documentales y cortometrajes de una treintena de países.