Según un comunicado de la ONG, la situación refleja la "falta de voluntad política" y supone "una burla a la ley", que el Gobierno debería evitar llevando a cabo "esfuerzos para cambiar esta cultura de romper la ley".

El 10 de octubre del año pasado, entró en vigor la Ley de Trabajo Infantil, que pretendía impedir que los menores de catorce años trabajen como empleados domésticos, en restaurantes o en puestos callejeros de comida.

Según los datos del Gobierno sólo 6.669 niños se encuentran en esta situación, pero Save the Childhood Movement subrayó en su comunicado que esta cifra es bastante inferior a la real, que sitúan en 12,67 millones.

Además, según la organización, sólo se han abierto 872 casos por violación de la ley durante estos doce meses y no se ha producido ninguna condena.

La ONG sostiene que es necesario que el Gobierno lleve a cabo acciones para proporcionar confianza a la sociedad sobre el cumplimiento de las normas y considera que hace falta sensibilizar a la población para que condene el trabajo infantil, además de tomar las medidas necesarias para la correcta implementación de la ley.

Save The Childhood Movement trabaja desde hace más de dos décadas contra la explotación infantil en la India, donde los niños representan casi la mitad de una población de más de 1.100 millones de habitantes.