"Me parece un paso muy importante de una investigación compleja, que todavía tiene muchos cabos sueltos", le dijo a EFE Milagros del Corral, que se enteró de la localización de los mapas en la ciudad de Sydney gracias a una llamada que le hizo anoche, "sobre las tres de la madrugada", el Grupo de Patrimonio Histórico de la Guardia Civil.

La directora señaló que, en la revisión "exhaustiva" que se hizo en la Biblioteca tras descubrirse el robo de los mapamundis el pasado mes de agosto, "se constató que en total eran diecinueve las páginas mutiladas", arrancadas de "diez libros" guardados en la Sala Cervantes, de acceso restringido a los investigadores.

De los diez ejemplares afectados por "el expolio", "cinco son incunables y otros cinco son 'impresos raros'", es decir, pertenecientes a una época en la que ya funcionaba con normalidad la imprenta "pero que contienen algunas rarezas", añadió Del Corral.

Gracias a esa completa revisión que se hizo, los responsables de la Biblioteca saben "con todo detalle qué hoja es en cada caso y sus medidas", pero, sin duda, las piezas más valiosas de cuantas han sido sustraídas "son los mapamundis" de Ptolomeo, afirmó la directora.

"Su valor es mucho mayor porque se trata de un incunable muy especial. Estamos hablando de los mapas de Ptolomeo que es el primer gran geógrafo de la historia, y que, muy probablemente, sirvieron de inspiración a Cristóbal Colón para su viaje a América", destacó Del Corral.

La directora indicó que revisar las obras que se consultan en la sala Cervantes no es algo que se pueda hacer a diario, porque "en esa sección se maneja un tipo de materiales muy peculiar", y los incunables, por ejemplo, "aunque sean impresos no llevan número de páginas, dado que en aquella época no se las ponían, y hay que mirar página a página, conocer muy íntimamente el manuscrito y tener a la vista el microfilm de la obra para verificar si ha desaparecido algo".

"Es un trabajo de especialistas y muy lento", añadió la directora de la Biblioteca Nacional, quien considera que mientras esté abierta la investigación, "hay que seguir manteniendo la discreción sobre el particular" hasta que la Guardia Civil crea oportuno comunicar el resultado de sus pesquisas, en las que tiene "plena confianza porque en muy poco tiempo han localizado los mapamundis".

Del Corral indicó que cuantos se dedican a la custodia del Patrimonio agradecen que "tanto la Interpol como, en el caso de España, la Guardia Civil, hayan creado equipos especializados para este tema y se les haya dotado de medios. Sin ellos no haríamos nada", aseguró.

La directora no sabe qué casa de subastas de Londres puso estos mapas a la venta ni si el autor del robo habría borrado antes el sello de la Biblioteca para que no se localizara su procedencia.

"Lo que deseamos ahora es recibir cuanto antes en la Biblioteca los mapas robados", aseguró.