"La samba, el tango o la salsa no tienen que ver con el flamenco, pero tienen la misma pasión y la misma fuerza, quizá por eso somos más parecidos. Creo que España es uno de los países de Europa más cerca de Brasil en el baile", afirma Jomar Mesquita en una entrevista telefónica con Efe, con motivo de su presentación en la última semana del Festival Internacional Madrid en Danza.

Mesquita visita Madrid desde mediados de la década de los noventa en su calidad de profesor de baile y colabora frecuentemente con la Escuela Círculo de Baile. "Es el primer sitio donde trabajamos en Europa para introducir los bailes populares brasileños y de salón; siempre somos recibidos con mucho cariño", comenta este artista, cuya compañía -fundada en 1992- triunfó en las dos últimas bienales de danza de Lyon.

Es una de las pocas formaciones profesionales -en Brasil es la única- que ha elevado el baile popular (el tango, el rock, el bolero, la salsa...) a los escenarios, añadiendo técnicas clásicas y contemporáneas, e incluyendo elemento teatrales y escenografía en los espectáculos.

Mesquita reconoce que al principio se encontró con "prejuicios" entre los bailarines de las disciplinas establecidas de la danza (contemporáneo, clásico o neoclásico), que no consideraban esta nueva especialidad al mismo nivel.

"Pero estos prejuicios han empezado a desaparecer en Brasil, porque la gente que conoce nuestro trabajo ya lo considera con la misma calidad artística, aunque el problema es que todavía no todas las propuestas son buenas", prosigue el coreógrafo, quien se congratula y lamenta a la vez de que Mimulus sea la única formación profesional en su país dedicada a este estilo.

"En el futuro, tendremos -espero- muchas compañías profesionales con trabajos de calidad", confió el profesor y bailarín, quien atribuye la situación a que se trata de un "fenómeno muy nuevo".

Estos bailes -añade- son muy antiguos, pero en el escenario y como espectáculo, sólo tienen unos 30 años de historia.

Tras su paso en 2005 por Granada y Sevilla con parte de la compañía y con fragmentos de montajes, Mimulus aterrizará del 25 al 27 de abril en el Teatro Albéniz con "Do lado esquerdo de quem sobe", un montaje de una hora de duración creado el año pasado y que habla del origen de la samba.

Este género, según Mesquita, surgió del mestizaje de la cultura "afro" y la europea, fraguado entre finales del siglo XIX y principios del XX, cuando la población negra abandonó el campo y se trasladó a las grandes urbes brasileñas con la libertad recién conquistada por el fin de la esclavitud.

"En este espectáculo trabajamos con las pequeñas cosas que ayudaron a nacer a los bailes populares brasileños y la música popular brasileña, por ejemplo, el choro, que muestra muy bien el mestizaje europeo y afro", comenta el coreógrafo, que ha incluido también músicas argentinas y cubanas, pues, de la misma forma, surgieron de la mezcla de culturas.

En "Do lado esquerdo de quem sobe" la compañía trabaja con la samba, "pero de una forma distinta a la de los carnavales, que es la que conocen los extranjeros. Es la samba de salón, y creo que será algo realmente nuevo para los españoles", adelanta Jomar Mesquita, quien firma conjuntamente con la compañía esta coreografía.