Se trata de una retrospectiva de 135 obras, que proceden de más de 70 colecciones institucionales y privadas de todo el mundo y que ofrece un amplio panorama histórico de la pintura española de los últimos cinco siglos.

La exposición, organizada por la Fundación Guggenheim y la Sociedad Estatal para la Acción Cultural en el Exterior (SEACEX), permanecerá abierta hasta el 28 de marzo de 2007.

Tras la inauguración se celebró una cena de gala en el propio museo, presidida por los Duques de Lugo y a la que asistieron más de un centenar de invitados, entre los que figuraban Carlos Westendorf, embajador de España en EEUU, y Juan António Yáñez-Barnuevo, jefe de la misión de España ante la ONU, además de representantes del mundo de la cultura.

La muestra, organizada por temas, y no por orden cronológico como suele hacerse habitualmente, recoge composiciones de, entre otros, Zurbarán, Murillo, Velázquez, Goya, Gris, Miró y Dalí.

Las obras se han clasificado en quince temas diferentes, entre ellos, monjes, bodegones, paisajes, el mundo doméstico, mujeres en público y mujeres llorosas.

Entre las otras secciones destacan las vírgenes y madres, desnudos, niñez, monstruos, caballeros y fantasmas, damas, crucifixiones, caídos y voladores.

La obra de Goya "Niños del Carretón", que estaba previsto que formara parte de la exposición, no pudo mostrarse, ya que fue robada la semana pasada en Pensilvania durante su traslado a Nueva York desde el Museo de Arte de Toledo, en Ohio (EEUU).