Tiempos nuevos, tiempos salvajes, cantaban Ilegales. La pandemia del coronavirus ha llegado con una fuerza letal que ha obligado al confinamiento de más de la mitad del planeta. Los músicos tampoco son ajenos a esta novedad, encerrados en sus casas, con planes y giras truncadas de golpe, con las preocupaciones ante la incertidumbre. Nos cuentan cómo lo llevan y envían ánimos y canciones a través de sus redes sociales para resistir, para transmitir esperanza. Como diablo cojuelo que levanta los tejados de las casas, nos hemos metido en sus hogares para averiguar cómo pasan el aislamiento y cómo planean retomar la actividad cuando esta pesadilla acabe. Ahora la música es más importante y beneficiosa que nunca.

Miguel Bañón, Los Marañones

1. En mi casa, en la huerta de Murcia. Pues tocando, haciendo vídeos de versiones en solitario del último disco de Los Marañones y de más canciones para colgarlos en redes sociales. Como lectura, recomiendo El vagabundo de las estrellas, de Jack London: lo leí de adolescente, pero creo que podría venir a cuento respecto al enclaustramiento y el uso de la imaginación. Mientras escribo este cuestionario estoy oyendo Sticky wickets, The Duckworth Lewis Method. Y me reí bastante con Érase una vez... en Hollywood, la nueva de Tarantino. Por último, Mindhunter me pareció una serie de gran riqueza en los perfiles psicológicos de sus personajes, magníficamente interpretados, por cierto.

2. Me preocupa más la situación de los afectados y hospitalizados que la de los confinados como yo; el número de muertes que está acarreando. Profesionalmente es fatídico: todos los conciertos que tenía, suspendidos sin ninguna solución alternativa por ahora.

3. Me parece estupendo para que la gente siga disfrutando de música en vivo a pesar del confinamiento. Y, desde el punto de vista del músico profesional, también es positivo esto de seguir conectado a tu público, aunque no vaya a resolver los problemas de sustento...

4. Un poco de introspección no viene mal en ese sentido. También para otro tipo de planteamientos, a nivel personal o respecto a nuestra actitud con el entorno. Sin duda es un momento de reflexión.

5. Intentar retomar mi carrera en el punto en que la dejé, salir, ver a mis amigos, moverme... Tengo mis dudas de cómo va a influir en el sector de la cultura el estado de recesión al que esto nos lleva, ya que todavía tenemos reciente la experiencia de la crisis de 2008, en la que los primeros recortes fueron para este mundo del 'ocio'.

Carmesí

1. Estoy en Murcia, en una zona céntrica pero bastante tranquila, lo cual me ayuda a sentirme conectada con todo, pero a tener calma a la vez. La verdad es que estoy aprovechando mucho estos días para tachar ideas de la lista de tareas pendientes para las que nunca tenía tiempo: cursos de formación, lecturas, series, películas clásicas que no había visto, videojuegos y muchas cosas, la verdad. En cuanto a libros, me está encantando el libro Silencio, de Thich Nhat Hanh, muy relacionado con el mindfulness, y necesario para entender la importancia de la calma en nuestra mente. En el ámbito artístico he leído hace poco varios libros, entre los que recomiendo Roba como un artista de Austin Kleon. Es un libro enfocado a coger inspiración y hacer crecer un proyecto artístico. En cuanto a discos y música, estoy fundiendo el Sueños y pan, de Xoel López, y también estoy escuchando mucho el último de Manel, Per la bona gent. Sobre series, me gustaría recomendar dos, una para echar unas risas y otra algo más profunda, pero ambas con capítulos que duran sobre los 20 minutos, fáciles de ver. Para las risas, sin duda, The office, la versión americana. Nunca me he reído tanto con una serie. Y en lo dramático recomiendo Bojack Horseman: dadle una oportunidad porque es muy profunda y tiene mensajes súper bonitos aunque con tintes dramáticos constantes.

2. Me está haciendo crecer, sinceramente. Considero que soy una persona fuerte mentalmente, en el sentido de que no me estoy viniendo abajo o agobiando, sino que estoy intentando sacarle partido a esta situación. Con ello me refiero a actualizarme y aprender en el ámbito de mi teletrabajo, enriquecerme con lecturas y cursos en lo personal, y explorando el mundo de las redes sociales para cuidar mi imagen como Carmesí y sacarle más partido a esa maravillosa ventanita que tenemos hoy en día y que es Instagram.

3. La verdad es que me pareció una iniciativa genial desde el principio que, con el tiempo, me generó mis propias reflexiones. Es cierto que es una herramienta genial que tenemos para entretener y compartir nuestras creaciones con los demás, pero también me planteo que a veces se satura un poco la red. Quiero decir, que también me parece respetable tomarse unos días de margen o no hacer nada, ¿no? Lo hago, hago directos y me encanta exponerme así, pero tomándome mis tiempos y siempre que me nazca con sinceridad, no como propósito u obligación.

4. En teoría sí, debería. Lo cierto es que me pongo a ratos para desarrollar ideas de canciones que he ido grabando anteriormente en audios del móvil. Tampoco me obsesiono, pero sí que es un momento agradable para ello. Me gusta que fluya con naturalidad.

5. Me he propuesto priorizar este tipo de actividades que estoy haciendo ahora que me llenan tanto, incluso cuando nos subamos al carrusel del día a día. Quitar tiempo de móvil y de otras cosas que nos estresan e intentar conservar un hueco de 'cuarentena' cada día. Seguir haciendo cursos, formándome, valorando cada momento del día y manteniendo la mente en calma, incluso cuando allá fuera parece que todos van corriendo.