El museo Siyàsa de Cieza acoge desde ayer Las flores del bien, una muestra de Álvaro Peña enmarcada dentro de los actos culturales que dan la bienvenida a la floración de los melocotoneros en la localidad murciana. Comisariada por Pedro López Morales, la exposición recorre lienzos y papeles en los que Peña simboliza, a través de su característico estilo, la explosión de color que se produce entre febrero y marzo en la capital de la Vega Alta.

Enfoque novedoso

Según López Morales, Peña viene trabajando formatos con acuarela, acrílico y tinta «totalmente novedosos para esta exposición» que consiguen plasmar con «fuerza y potencia» la intensidad cromática de la floración.

Recién llegado de Nueva York,

donde ha creado el cartel de la New York Summit en la Gran Manzana, en artista murciano relaciona en Las flores del bien su carismático universo creativo con la naturaleza y lo exhibe en pequeño formato.

Dilatada trayectoria

Álvaro Peña (Murcia, 1968) estudió Ciencias Políticas y Sociología en la Complutense de Madrid y es el miembro más joven de la Real Academia de Alfonso X el Sabio, iniciándose a una edad muy temprana en el mundo del arte, en cuyo seno ha desarrollado su creación en las más diversas disciplinas artísticas. De carácter polifacético, su obra abarca dese la pintura hasta la viñeta periodística, pasando por la ilustración o, incluso, la narrativa, se destaca habitualmente de él su inquietud intelectual y creadora.

En 2011 fue seleccionado al Premio fundación Inocente, inocente (Madrid). Un año después se hizo con el Premio Institucional a la Solidaridad. FEBHI (Madrid); y en 2013 ganó el Premio Arte y Cultura Ruralmur (Murcia). Hace un lustro estuvo nominado al premio Internacional de Arte Contemporáneo Eureka.

Trabajando con la Unesco

Más recientemente, en 2018 ganó el galardón Cultura Díaz Bautista y realizó una obra para la sede de la Unesco en Shanghái. Además, el Instituto Cervantes de Estocolmo le invitó a presentar en Suecia su trabajo Álvaro Peña: Caprichos e inquietudes de un pintor.

Ha expuesto en prácticamente toda la geografía nacional, y sus trabajos se pueden ver en lugares tan dispares como Lituania, Italia, Estados Unidos, Portugal, Francia, China o Rumanía. Además, sus obras se pueden encontrar en instituciones y colecciones públicas y privadas de España, Italia, Estados Unidos y China.