Ayer viernes llegó a las tiendas El Milagro, el tercer álbum de El MilagroViva Suecia, un esperanzador trabajo del que ya se conocían Lo que te mereces y Algunos tenemos fe. Para su presentación, la banda murciana no para de sumar fechas a la gira, pero antes visitarán once ciudades para encontrarse con sus fans en showcases y firmas de discos; y, por supuesto, la capital del Segura no va a esperar mucho: de hecho, estarán esta tarde en la Fnac de Nueva Condomina (18.00 horas).

El Milagro cuenta con colaboraciones de Amparo Llanos (Dover, New Day), Joe Crepúsculo y Rodrigo Cominero, que ya forma parte del grupo. Producido por los propios Viva Suecia y Carlos Hernández, el álbum contiene once canciones donde el sonido se enriquece con distintos ritmos, cuerdas al estilo de las grandes producciones de Oasis o The Beatles, vientos, pianos, teclados y nuevas maneras de proyectar emociones.

Estamos ante el que va a ser uno de los discos del año. Viva Suecia (premio MIN a la Mejor Canción en 2017 y premio MTV a Mejor Artista Español en 2018) han multiplicado por millones sus escuchas en plataformas digitales, entran en lo más alto de las listas de ventas, y siguen comprometidos con dar el máximo nivel en sus composiciones, grabaciones y directos. Ahora, han vuelto a acertar en la diana. Rafa Val, voz de la banda, nos desgrana una a una las canciones del álbum al final de esta entrevista. Pero no van a necesitar milagros para tener un gran éxito....

El Milagro os va a catapultar nuevamente a la popularidad y a lo más alto de las listas de ventas. ¿Cuál es el estado de ánimo de la compañía y el grupo?El Milagro

Se ha creado un clima muy bonito entre todos. Estamos con muchas ganas, medio nerviosos y encantados con todo el asunto. Es bonito vivir este momento.

¿Cómo fue esa doble experiencia de tocar en DCode a las cuatro de la tarde y en el B.Side a las doce de la noche? Debió ser una locura...

Al menos para nosotros fue algo extraordinario. Una de esas 'pruebas' a las que nos enfrentamos de vez en cuando, y fue realmente bonito. Salimos para Madrid el mismo día a las siete y media de la mañana, tocamos, hicimos entrevistas y volvimos para reencontrarnos con la gente de la tierra, que siempre es algo importante.

¿Ibais con Red Bull, con bocata de jamón?

En realidad vamos echando una siestecilla cuando podemos. Yo en la furgo me dormí casi todo el camino de vuelta. El año pasado ya hicimos un: viernes, Santiago de Compostela; sábado, Bogotá, que ya nos puso un poco a prueba...

En este disco ha colaborado Rodrigo Cominero, que os va a acompañar en directo, como Jesús Cobarro hasta hace muy poco. ¿Él también os acompañará en la gira?

¡Nos gustaría! A partir de la experiencia con Cobarro estamos intentando que venga al mayor número de conciertos posible. Nos encantaría. Ver a alguien que hace las cosas con tanto amor, con tanta ilusión, con esa predisposición total por hacerlo lo mejor posible en cada momento, ha sido una experiencia muy bonita, y no creo que sea la última vez que se suba con nosotros a un escenario. En el caso de Rodrigo, ya es un fichaje total de la banda. Lo llevamos para grabar el disco, y a partir de junio o así empezó a tocar con nosotros.

Y ha habido más colaboraciones en el disco.

Sí, está Amparo Llanos, que es un encanto y un talentazo. Carlos Hernández produjo el último disco de New Day un poco antes que el nuestro, así que nos comunicamos a través de él. Le gustaba el proyecto, le gustó la canción y cantó. Esa voz nos hacía mucha ilusión... Luego, en la última canción está Joe Crepúsculo, un tipo al que admiramos muchísimo, con el que nos une una amistad bonita, muy natural. Teníamos un trozo en el que cabía perfectamente y lo dejamos para que hiciese su magia.

La canción que da título al disco, El Milagro

No nos lo pensamos dos veces. La canción pedía a gritos un arreglo de este tipo. Hablamos con el arreglista, con el director, y trajimos una sección de cuerdas de entre doce y catorce músicos que hizo una maravilla que, a día de hoy, todavía nos saltan las lágrimas al escucharla.

También tenéis arreglos de cuerda en Días amables

Ojalá. Para mí es un halago, desde luego. Por las reviews que nos están llegando, creo que puede convertirse en el primer hit -muy entre comillas- medio tiempo de Viva Suecia.

Va camino de ello. Me contabas hace poco que en este disco hay mucho de soul, música negra, pero también noise, brit y todo aquello con lo que flipabais en los noventa. Pero sorprenden los arreglos de cuerda. ¿Cómo decidisteis incorporarlos?

Sencillamente porque lo vimos muy claro. Somos un poco obsesos, y a veces soñamos o imaginamos cosas que no existen, y nos vienen a la cabeza arreglos con una tímbrica determinada, para un momento determinado de algunas canciones, y la única diferencia es que esta vez hemos tenido el tiempo y los recursos para hacerlo. En el caso de El Milagro, incluso de Días amables, era como una necesidad. No estarían terminadas sin esos arreglos.

Cuando todo el mundo estaba por ahí de vacaciones y veraneo, vosotros estabais encerrados con los amplis a todo volumen haciendo canciones. Algunas las habéis hecho en el estudio.

Sí, es la primera vez que nos sucede.

¿Os faltaba alguna?

En realidad, si hubiésemos tenido seis, habría sido un disco de seis canciones. Llegamos al estudio con diez, y teníamos una pequeña idea que rondaba por ahí y no se llegó a materializar. Nosotros nunca componemos de más y luego escogemos; nos centramos en hacer las canciones que creemos que podemos llevar a cabo con toda la solvencia, de las que podemos estar orgullosos, y en un momento dado esta idea surgió, se desarrolló y supuso un experimento, una cosa bastante divertida. Es el tema en el que colabora Joe Crepúsculo. Hicimos una canción a base de loops. Teníamos una batería, una base rítmica, y cogimos un cachito y lo loopeamos; cogimos una línea de bajo -prácticamente la misma en toda la canción-, un arreglo de guitarra, y los loopeamos, y, al final, casi que hicimos una canción digital.

Se trata de Fóllame

Creo, y es una opinión personal, que un título así hace desmerecer a la canción. Da la sensación de que hemos puesto un título muy llamativo para dar un empujón a una canción menor, y ninguno de nosotros piensa que sea una canción menor. Me sonaba un pelín vulgar, y creo -igual me equivoco- que resta un poco de importancia a una canción bastante potente. Es el título definitivo, mal que me pese.

No sé si, por ese motivo, el título de El Milagro

No [Risas], es obra de Yamandú Pazos, que se ha extralimitado -gracias a Dios...- en sus funciones y ha ido mucho más allá de lo que cualquiera de nosotros podría esperar. Ha hecho un trabajazo increíble con el arte..., y lo más visible, claro, es una portada que nos gusta desde el principio: de todas las opciones, esta fue la primera que vimos. Estábamos en México, si mal no recuerdo, y Carlos Galán nos dijo que había encontrado un diseñador y que nos pasaba unas pruebas, y esta fue la primera que vimos. Luego nos enseñó un montón más, pero nos decantamos por esta porque nos parecía increíble. Y luego todo el trabajo que ha hecho con la simbología, con la distribución..., estoy pensando, por ejemplo, en el formato físico del vinilo, que es una cosa bastante especial.

El Milagro es vuestro disco más complejo hasta la fecha.¿Qué os planteabais? ¿Teníais la oportunidad de hacer todo lo que quisierais y lo hicisteis?El Milagro

Sí, y además no nos hemos puesto límites. Nos hemos permitido dar rienda suelta a todas las cosas que se nos pudiesen pasar por la cabeza; no hemos pensado en ningún momento en qué iba a pensar la gente de lo que hiciésemos o no. Tomamos la determinación firme de poner todo el alma en este disco y de demostrar todo lo que fuésemos capaces de hacer.

Para esta gira de presentación ya tenéis un montón de fechas, incluso aparecéis en el cartel de algunos festivales. ¿Estáis trabajando en un nuevo show distinto a los anteriores aprovechando que Viva Suecia está en la cresta de la ola?

Sí, estamos montando una bien gorda, la verdad. Estamos con el show, las luces, la puesta en escena..., con todo, y ya con Rodri dentro de la banda. Se podrá ver a partir de noviembre, y confío en que sea exactamente como lo tenemos pensado, porque va a ser increíble...1. Lo que te mereces

1. Lo que te merecesHabla de la cantidad de cosas que te pueden pasar por la cabeza a lo largo de un día. Ya no solo que te sucedan, sino la cantidad de sitios a los que te llevan tus divagaciones desde que te levantas hasta que te acuestas. De ir por la calle y fijarte en algo, recordar algo que te pasó, algo que tienes que hacer, pensar en alguien, demostrarlo, sugerir, y tiene esa frase demoledora del estribillo que es como muy ambigua: «Eso es lo que te mereces», y que en realidad es la proposición de un juicio ante el interlocutor. Básicamente dice que eso es lo que te mereces tú, que te conoces y sabes cómo eres; que tú sabrás si te mereces cosas buenas o malas. Es un ejercicio de estilo, porque la canción está más ligada a la etapa anterior, y nos apetecía retomarlo donde lo dejamos.

2. Qué querías ser de mayor

2. Qué querías ser de mayorLleva unas campanas que son un homenaje clarísimo a Blondie y a Texas; nos apetecía que se escuchasen bien fuerte. Nos tomamos muchas molestias y mucho tiempo para buscar el sonido de campanas exacto que queríamos.

¿Qué queríais ser de mayores Viva Suecia? ¿Y tú, Rafa?

Yo tengo muchísima suerte. Ha costado trabajo, pero soy lo que quería ser. Todos estamos un poco flipando por eso. No puedo hablar por los demás; supongo que, en mi primerísima infancia, yo quería ser médico, veterinario o algo así. Pero desde muy prontito ya quise ser músico.

3. Necesitamos tanto

3. Necesitamos tantoEsta canción ya empieza a romper un poco los esquemas de lo que venía siendo el sonido Viva Suecia. Tiene un sinte con unos graves muy potentes, un ritmo que invita un poco más al movimiento sin ser una canción bailable. Es medio sincopado: tiene una guitarra con un delay, pero que está tocada con palm mute, y tiene un piano, que ya empieza a sugerir ciertas cosas sin irse demasiado de la onda. Luego tiene un arreglo muy Heart in a cage, de los Strokes; la influencia es total... Y es una de nuestras favoritas. Mucho tiene que cambiar la cosa para que no sea la canción que abra los conciertos en la gira.

4. Esos días amables

4. Esos días amablesEn el disco anterior teníamos Lo último que se pierda, una canción que nace de un piano y una voz, pero en la que escondimos demasiado el piano...; nos volvimos un poco más enrevesados o atmosféricos, o como quieras llamarlo. Pero en esta nos preocupamos de que un cachito de la canción fuese literalmente piano y voz a solas. La última vez nos fuimos por otros derroteros, y esta vez nos apetecía bastante hacer algo así.

La canción entra con un ritmo muy simple, pero muy marcado, que puede recordar a Coldplay o Snow Patrol, y luego tiene una parte muy bonita que es la wilkera [de Wilco]: ese arreglo cuando baja todo de repente, un Hammond a lo lejos y la guitarra de Alberto haciendo un solo, pero no muy grave, no a muy alto volumen, con un fuzz. Y, de repente, empieza una parte en la que hay muchísima letra que corta en seco y entra una orquesta maravillosa: la misma sección de cuerda que tocó en El Milagro; es la parte más 'banda sonora' de Viva Suecia. Nos preocupaba hacer un disco de arreglos simples y mucha letra; queríamos desarrollar bastante la parte estrictamente musical de la banda, que creemos que debe estar siempre presente porque es marca de la casa.

5. Algunos tenemos fe

5. Algunos tenemos fe

Es el último single que habéis publicado, con ese ritmo funk que lleva a Gnarls Barkley y Michael Kiwanuka. ¿Cómo vais a parar a ese tipo de artistas? ¿Se trataba de que Jess le sacara brillo a su bajo?

Muchas de las líneas de bajo de Jesús tienen que ver con una conversación con Miguel de Lucas, que toca en Rufus T. Firefly y es antiguo bajista de Sunday Drivers; una conversación en la que el uno convence al otro de que se compre un bajo de escala corta. Parece una tontería, pero redefine mucho la manera de componer, y de repente estábamos muy en la onda de Kiwanuka y Danger Mouse, con estos bajos que son como muy secos, muy Hoffner, que suenan a palo, pero que son muy concretos y le dan una vida a los bombos de la batería increíble. Y estamos muy metidos en esta historia, en cómo Danger Mouse consigue un sonido Motown que suena realmente antiguo, pero muy actual a la vez.

Aquí todos los instrumentos tienen su espacio, todo se entiende, todo el mundo toca con mucho corazón. Y un día a Jesús se le ocurrió esta línea de bajo maravillosa; empezamos por ahí, le dimos el toque Viva Suecia y al final acabó saliendo una canción que aquí ya sí que el disco ha cambiado radicalmente del color blanco de Lo que te mereces al color negro.

¿Hay más puntos negros en este disco?

Hay más toquecitos. Aquí es donde se ve más claramente, pero también hay una sección de vientos en La fuerza mayor que, aunque están dentro de una canción que no es muy negra, sí que podrían estar en una de León Bridges o en una más tranquila de Marvin Gaye.

Os ha dado fuerte por el soul últimamente.

Trabajamos mucho sin instrumentos; trabajamos mucho hablando de música.

6. La fuerza mayor

6. La fuerza mayorPor el título..., ¿no proviene esta canción de las sesiones de aquel primer álbum?

No, es un pequeño juego que tenemos con los amigos de Kracauer, banda murciana de la que dentro de poquito tendremos buenas noticias.

Tienen listo un disco fabuloso.

Sí, me consta. A mí me parece una colección de canciones maravillosa. Juanfra, a quien le gusta mucho Viva Suecia, tuvo a bien meter en un trocito de las canciones de su nuevo álbum la frase: «La fuerza mayor». Y, de alguna manera, cuando estaba escribiendo la letra de este tema, en un cachito me cabía muy bien y me pareció que era un buen momento para jugar un poco al tenis: tú me das la pelota, yo te la devuelvo, y a ver hasta dónde podemos aguantar. También nos hacía gracia que hubiese una canción que se llamase como el primer disco. Aquí es donde participa Amparo Llanos.

7. Te prometo

7. Te prometoDe las canciones más brillantes; en cuanto a sonido, digo, no nos estoy tirando flores... Estaba mirando a The Cure, o más a los ochenta. De hecho, hay un arreglo como de timbales lanzados que recuerda mucho a esta época ochentena, y lleva un arreglo de e-bows con una acústica; algo muy nuevo también: nunca habíamos metido una acústica de manera tan clara. Está en Días amables y en Te prometo.

La canción tiene una cosa que llevábamos queriendo hacer mucho tiempo y nunca nos salía de forma natural: un cambio de tonalidad, y muy brusco. Termina el primer estribillo en la menor, de repente hacemos un la mayor y modulamos, nos vamos a sol menor o a re menor, no recuerdo... La cuestión es que modulamos tres tonos, o tres tonos y medio arriba, y en el siguiente estribillo lo volvemos a recuperar. También tiene un arreglo muy obsesivo, muy vacilón de aprender, que se repite mucho durante la canción. Creemos que va a funcionar muy bien en directo.

8. Creo que aprendí a decir no

8. Creo que aprendí a decir no¿Os ha costado mucho?

No sé si realmente hemos aprendido, porque somos muy valientes y muy aventureros. El título explica bien de qué va la canción. Teníamos muy en la cabeza a Travis.

¿El grupo británico de los noventa?

Sí, eran como la versión 'valium' de Oasis. Es otra de las cosas que habíamos intentando hacer y no habíamos conseguido del todo. Es una canción prácticamente lineal donde no hay subidas; la batería y el bajo van todo el tiempo igual. Los cambios los marca la voz y un plato de la batería. Está cantada de manera muy sosegada.

9. El milagro

9. El milagroEsta, a nivel personal, es de mis top-top, porque tiene en las estrofas, en las intros, una cosa radicalmente opuesta a los estribillos; además, metimos un dobro que nos prestó Ángel Carmona, de Hoy empieza todo. Nos prestó también una Rickembaker, una acústica, y lo usamos todo. Es una canción que empieza con un ritmo bailable, pero que tiene un estribillo muy britpop, muy con este arreglo que le venía al dedillo, muy luminoso. Y, de repente, se vuelve a la estrofa y la canción se ha ido a otro sitio. Creo que hemos hecho una canción -a nivel de melodía y arreglos- que podríamos llamar 'bonita'.

10. Será

10. SeráEs una canción que rompe el rimo apacible del disco.

Sí. Como te decía, nos hemos permitido hacer muchas cosas que siempre hemos querido hacer y que, por lo que sea, no habíamos hecho aún, y esta es una canción de espíritu punk: apenas dura dos minutos y medio y va bastante rápida. Un tema de consumo rápido, de esas que tocas en un concierto y sirve de break. Es una canción con poca información, con un mensaje muy claro, que no deja tiempo casi para respirar. Me parece que hemos conseguido algo mejor de lo que creíamos que podíamos conseguir con este formato de canción... Pensábamos más en The Vaccines que en Los Planetas.

11. Fóllame

11. FóllameCreo que es el broche perfecto por la sencilla razón de que es el fin del viaje. El disco empieza con Lo que te mereces -que estilísticamente es Otros principios fundamentales- y va mutando hasta la canción más 'rara' de Viva Suecia, que es Fóllame. Es la guinda de la mutación de la banda, y cuando realmente se desmadra El Milagro y nos vamos a un terreno que no habíamos pisado nunca. Y si metes a Joe Crepúsculo en la ecuación, pues todo se vuelve más exótico.

¿Pasaba por allí o le buscasteis?

Teníamos dos opciones: hacer una colaboración con alguien para que subiese los likes y las escuchas y nos ayudase un poco de cara a la aprobación del álbum -que es algo totalmente respetable-, o hacer una colaboración de la manera más natural posible, contando con un amigo. Hemos tenido la suerte de haber compartido muchos momentos con él, nos llevamos muy bien y nos encanta lo que hace. Teníamos un cacho de esta canción, que es un poco puzzle, y nos cabía perfectamente, así que le dijimos: «Joel, ¿te apetece hacer esto? Nos encantaría». Nos pasó algo, nos flipó, cantó unas cuantas frases -esta parte electrónica un poco ambiental de la mitad hacia el final- y nos pareció un broche genial a un disco que empieza siendo un cisne y acaba siendo un patito feo, en el mejor sentido de la referencia.

Suele ser al revés.

Pero es un disco que empieza siendo amable, bello, y se va retorciendo. Sigue siendo bonito, pero con este rara avis al final acaba siendo un experimento que sale bien.

¿Llegasteis a pensar en la posibilidad de, en lugar de que apareciera en el track-list, apareciera como hidden track?

Le dimos muchas vueltas. Es algo que también nos gusta. Esto viene muy de los ochenta, de los noventa, cuando uno se sentaba a escuchar un disco tranquilamente.