«En su mundo estar triste es ser feliz, lo insensato es lo sensato, sentir dolor es sentir alegría, lo imprudente es lo prudente y la muerte y el sufrimiento son la materia de la que están hechos los sueños». El musical de La familia Addams, con los tenebrosos Gómez (Xavi Mira) y Morticia (Carmen Conesa) a la cabeza, aterrizan esta tarde en el Teatro Romea de Murcia, y lo hacen para enfrentarse a una de las pesadillas más espeluznantes a las que todo progenitor debe hacer frente: sus niños se hacen mayores. La macabra Miércoles se ha enamorado de Lucas Beineke. ¿El problema? Que es un chico normal. ¿El drama? Lo ha invitado a cenar a su casa. Uff. «Bienvenidos a una nefasta, fatídica e hilarante noche en casa de los Addams: los más ocultos secretos se van a revelar; las relaciones, amoríos y amistades serán examinadas, y la Familia Addams al completo, ancestros incluidos, deberá hacer frente a la única y terrible cosa que ha logrado evitar durante generaciones: el cambio».

El espectáculo, al más puro estilo de Broadway, traslada al teatro a los personajes creados por el lápiz macabro y satírico del ilustrador Charles Addams en los años treinta; trazos popularizados en la serie de los sesenta que, con libreto de Marshall Brickmann y Rick Elice y música de Andrew Lippa. Y por si todavía quedaba alguien ajeno a esta tétrica familia, los Addams dieron el salto a la gran pantalla en 1991de la mano de Barry Sonnenfeld (Men in Black, Wild Wild West), y desde entonces han sido numerosas las adaptaciones cinematográficas de esta peculiar familia.

Sin embargo, su aparición sobre las tablas no llegó hasta 2009, cuando la pieza que esta semana se adueña del Romea llegó al Ford Center for the Performing Arts Oriental Theatre de Chicago. No obstante, su gran estreno tuvo lugar en el Lunt-Fontanne Theatre de Broadway en 2010, desde donde salió de gira por Norteamérica para, después, ser traducida al castellano tres años después en Argentina. Casi cuatro años más tuvieron que pasar para que el barcelonés Esteve Ferrer se animara a trasladar la franquicia a España -se estrenó en 2017 en el Teatro Calderón de Madrid- y a adaptarla para conquistar al público con, entre otras cosas, irónicos guiños a la actualidad; una decisión que, sin duda, fue un éxito. «Los productores de la obra original nos han dicho que esta es la mejor versión que se ha hecho en todo el mundo», defiende su protagonista Carmen Conesa. El director, junto a Silvia Montesinos, se pasó dos meses y medio con el libreto para cuadrar el texto, que rimara y que en castellano sonara bien y, tras medio año de llenos en la capital, se embarcó en abril de 2018 en una gira por la Península que, hasta el próximo 10 de junio, se establece en Murcia.

En el espectáculo, de dos horas de duración y dirigido a toda la familia, participan veinte actores, bailarines y cantantes, y treinta miembros de equipo técnico. De la mano de LestGo -la misma productora que hace pocos meses trajo a la ciudad el musical The Hole Zero-, Ferrer confía, además de en el alicantino Xavi Mira para que le dé vida a un correcto Gomez y en Carmen Conesa como la seductora y fría Morticia, en la joven Lydia Fairén como la gamberra Miércoles, en Meritxell Duró como la abuela, en Alejandro Mesa para hacer del celoso hermano Pugsley, en Javier Canales como el mayordomo de la familia y en Frank Capdet para meterse en la piel del tío Fétido.

«En la cena ya no se sabrá quién es el normal y quién no, qué es normal y qué no, o si ser normal es algo bueno», explica la intérprete de la pequeña de los Addams. «La filosofía Addams es que ser normal es aburrido», defiende Conesa tras puntualizar que «gran parte de la adaptación ha sido libre, las coreografías y el vestuario son propios, las letras son adaptadas... Aunque hay parte de la obra de Broadway, la otra parte no lo es». Para la intérprete barcelonesa, calzarse los tacones de Morticia en este musical es todo un regalo -«Como si me hubiera tocado la lotería», bromea- y desvela que caracterizarse como la seductora vampiresa le cuesta hora y media. En línea con la originalidad de la obra, la madre de Miércoles insiste en que, aunque «se mantiene totalmente el humor negro de los Addams originales, hay guiños al humor español».

Así, por ejemplo, en las canciones se nombra a Trump y al gobierno nacional, lo que, indirectamente, se traduce en una mayor proximidad con el público. Y es que los números musicales son los mismos que en la obra original, pero las letras no están traducidas, sino adaptadas para que el acercamiento a la platea sea mayor.

Conviene destacar que además que el espectáculo La Familia Addams se ha posicionado como el primer musical que ha implantado el sistema Stage-Access, un pionero método de accesibilidad integral para que las personas con discapacidad auditiva o visual puedan disfrutar del show. Mediante técnicas de inteligencia artificial, esta nueva herramienta permite enlazar de forma completamente automática lo que sucede en el escenario con el espectador.