Saltando entre abogados de oficio llegó el santanderino, criado en Murcia, Elías León Siminiani al Flako, protagonista de Apuntes de una película de atracos, desde el miércoles nominada al Goya a la mejor película documental, algo que director reconoce que «anhelaba, pero no esperaba» y que supone «una carta de existencia» para el filme. Con referentes como Atraco perfecto (1956), de Stanley Kubrick, Rififi (1955), de Jules Dassin, o Círculo rojo (1970), de Jean-Pierre Melville, el cineasta reconoce en una entrevista con Efe que está «encantado» de que esta historia, que evoca al alcantarillado de los barrios de Madrid, vaya a desfilar por la alfombra roja de los Goya.

«Siempre había fantaseado con una película de atracos», explica Siminiani, quien se confiesa amante de la no ficción por la libertad y el tiempo de creación que le permite a sus películas. El filme narra la historia de cómo Siminiani conoció al Flako, cabecilla de la 'banda del Rayo' -atracadores, encapuchados y ataviados con la camiseta del Rayo Vallecano-, a quien se denominaba el 'Robin Hood de Vallecas'. Este hombre fue detenido al salir por una boca de alcantarilla tras atracar una sucursal bancaria. Cuando el Flako ya estaba en la prisión madrileña de Estremera, Siminiani conoció su historia a través de una reportera de sucesos que le puso en contacto con un inspector de policía y, a partir de ahí, saltó de abogado en abogado de oficio hasta llegar a él a través de su mujer. Desde ese momento surgió una relación de amistad y «complicidad creativa» forjada con un denominador común: el interés por hacer una película de atracos. «Cuando le conocí y empecé a hablar con él me di cuenta de que ahí había material para un documental», subraya. Flako está ahora inmerso en el «complicadísimo y muy solitario» proceso de reinserción, por lo que ver que su documental nominado a los Goya es algo que le hace compañía. «Está disfrutando del viaje», enfatiza el cineasta. Y explica que, según le dice el Flako, está viviendo una experiencia «completamente nueva en la que jamás en la vida se habría imaginado tener algo que ver». «Lo vive como un sueño», subraya Siminiani, quien ve a su protagonista como una persona «muy realista que sabe que era un tren que no podía dejar pasar».

De hecho, como se puede ver en la película, el Flako le cuenta a Siminiani que está escribiendo una novela sobre su vida, de la que le pasa unas páginas manuscritas, que han hecho que el director de cine vea en este atracador «un potencial en bruto como narrador». La editorial Libros del K.O. publicará el 21 de enero esta novela, bajo el título Esa maldita pared, que, según Siminiani, debe pasar a la gran pantalla porque «es brutal», aunque todavía no sabe si será él quién tomará esas riendas. El director confía en que su película, que ya se ha estrenado con varios pases en la filmoteca de Santander y estas semanas llegará a la mayoría de ciudades, reciba «un empujón» gracias a los Goya.

Tras avanzar de una preselección de 78 documentales, «15 o 20 de ellos de muy alto nivel», según el cineasta, Apuntes de una película de atracos competirá por el Goya con Camarón: flamenco y revolución, Desenterrando Sad Hill y El silencio de otros.

«Es complicado siempre porque hay muchísimo nivel, pero hemos puesto toda la carne en el asador a nivel de medios, prensa y llegar al mayor número de sitios posibles, y ya que estamos aquí no vamos a tirar la toalla», manifiesta el director, quien ya estuvo nominado a estos premios con el documental Mapa.