«Todos conocemos la dulce historia blanda de Alicia», apunta Katarzyna Rogowicz (Varsovia, 1971); pero la polaca, afincada en Murcia desde hace años, busca en Wonderland -título de la muestra- la «contraposición con Disney». Su particular visión del 'País de las Maravillas' está más vinculada a la «oscura» historia de Lewis Carroll -autor del cuento original- que al popular título de animación. Y es que la artista, que presentó ayer este trabajo en la sala municipal El Jardín de Molina de Segura, busca algo «real» dentro de la delirante y casi psicodélica historia del escritor británico.

En concreto, Rogowicz reflexiona en Wonderland sobre «ese cambio que vive una joven cuando pasa de niña a adolescente y, de un día para otro, se convierte en una mujer». La artista polaca pone el foco sobre la menstruación, un concepto que considera «tabú», y, en segundo término, sobre el miedo; eso sí, desde una perspectiva valiente: «En esta obra lo que hago es recoger los personajes que más me interesaban del cuento, los más negativos, y los dibujo para después encerrarlos en una especie de caja-ataúd», una metáfora que su autora define como «matar el miedo». «Es que para mí el arte es curativo. Poder visualizar lo que siento, lo que hablo, lo que escribo, es como poner un punto y aparte para seguir adelante. De hecho, cuando ven los cuadros muchos me dicen: 'Estás mal', y yo digo: 'No. Ahora, después de hacerlo, estoy fenomenal'», explica la polaca.

Y todo esto viene porque Rogowicz, que no es la primera vez que se 'apropia' de cuentos de la literatura infantil o tradicionales para poder empezar a crear o hablar de su propia historia, se ha dado cuenta de que «el arte tiene que ver con el pasado, con mi construcción como persona, como mujer y como artista, y en función de cómo me encuentro en la actualidad hablo de un tema u otro», confiesa en palabras para esta Redacción. Por ello, y aunque el marco no pueda ser más fantasioso, Katarzyna muestra una «realidad» que es tanto suya como de los demás, de los suyos. «Veo a mi hija -que, por cierto, se llama Alicia- y es como que la historia se repite; da igual en qué año vivimos, todas pasamos por las mismas cosas». De hecho, en este sentido, la artista cree que Wonderland es una exposición idónea para visitar «en familia»: «Animo a que la visiten familias completas, desde los niños a los abuelos, porque puede ser curioso ver cómo cada generación interpreta el mismo cuento de una manera distinta y cómo cada un0 es capaz de identificarse de una manera o de otra».

La muestra, que ya se pudo ver este año en Moratalla y es una de las 56 exposiciones (con obra de 70 artistas murcianos) que se organizarán este año en 30 municipios en la segunda edición del Plan de Espacios Expositivos, está compuesta por nueve cuadros, 'cuadros-escultura', que incluyen técnica mixta, así como una serie de objetos que construyen las vitrinas ('cajas-ataúd'). Por otro lado, Rogowicz incluye varias piezas a las que ha llamado 'radiografías' y que son «bocetos ampliados del cuaderno de sueños de Alicia». Aunque una de las cosas que más llaman la atención en Wonderland es cómo la creadora ha conseguido «sacar elementos de los cuadros y componerlos en el espacio», aprovechando la 'pecera' que se erige en el centro de la sala para crear una suerte de 'tiovivo' que pretende generar sensación de movimiento.