El artista plástico Marín Guevara inauguró el pasado viernes la exposición Cuchara en Casas Consistoriales de Mazarrón, una muestra comisariada por Pedro López Morales y que se podrá visitar hasta finales de julio. En la inauguración, Marín Guevara relató el contenido de una exposición que muestra su particular visión de lo doméstico en cinco espacios diferenciados y reflejados en varias disciplinas.

En su acepción más conocida, la cuchara es un utensilio que sirve para comer, pero entre otras numerosas definiciones, también podría referirse a una posición para dormir en la que un cuerpo acoge a otro, protegiéndolo.

Marín Guevara utiliza este último concepto y su ausencia para explorar, mediante técnicas diferentes -pintura, escultura, instalación o fotografía-, sus más recurrentes obsesiones y líneas temáticas de trabajo: el silencio y la incomunicación, la relación con el padre, los patrones relacionales aprendidos y la inmersión en los propios conflictos e inquietudes. Y lo hace a través de un proceso experimental inspirado en una búsqueda interior alejada de referencias externas.

El proyecto pretende recrear las distintas dependencias de una hipotética casa: E l salón de las cucharas, La habitación del padre, La habitación de la madre, La habitación para pensar (o del no-diálogo) y La habitación del hijo. Para ello se sirve, en ocasiones, de elementos escogidos e intervenidos de la casa donde creció, que le han servido como tótems o elementos de anclaje con su pasado.

Las obras dialogan entre sí, creando un universo de interrelaciones ambiguas y crípticas, al tiempo que subyace una profunda reflexión sobre la carencia y el 'yo' en cada una de ellas.