Bailar el viento es la actitud ante la vida del que vive y sobrevive en el día a día, ante la fuerza huracanada de los contratiempos, es una declaración de intenciones, la apuesta por ser uno mismo, pase lo que pase, y venga lo que venga». Así presentó Manuel Carrasco su séptimo álbum, movido por «el amor, la vida y la libertad».
El cantante actuó este viernes noche en la Plaza de Toros de Murcia, y mostró ante un numeros público que está «agradecido a la vida, a la gente que disfruta la música». Allí estuvieron los incondicionales que siguen la carrera del artista desde su paso por Operación Triunfo y los que se han ido sumando a lo largo de estos años.
En todos estos años de carrera Manuel Carrasco ha aprendido a que todo fluya, llevándole hasta el punto donde ahora se encuentra, situándole como uno de los artistas más importantes de la música de este país y Bailar el viento es el disco donde se palpa, de forma más evidente, la evolución del artista en su composición, en su sonido y en todo su proceso creativo, como aseguran los promotores del concierto.
El resultado de un año de trabajo ha sido «un disco cosmopolita donde se encuentran matices y aromas de muchos rincones». Las cuerdas se han grabado en Bratislava, se ha mezclado en el estudio Electric Lady, estudio que fundó Jimmy Hendrix en Nueva York de la mano de Michael Bauer ( Beck, Bob Dylan ,Coldplay, Rolling Stones) y se ha grabado y producido en España por Pablo Cebrian.
