¿Por qué escribir novela negra? ¿Qué le hizo decantarse por este género?
La verdad es que no lo sé, me sale solo. En todas mis novelas hay dos componentes: el viaje en el tiempo y el misterio. No lo puedo remediar.
Mencione un autor del género que podamos considerar de culto para usted.
El padre de la novela detectivesca moderna, Wilkie Collins.
¿A qué personaje, policía o detective, le hubiese gustado crear?
A Sherlock Holmes, es el más grande de todos los tiempos.
¿Prefiere la sangre o la psicología en sus novelas?
Una justa combinación de ambas sería el cóctel ideal.
¿Algún arma preferida a la hora de matar?
De fuego, sin duda.
Valore la novela negra española frente a la de otros países.
Goza de muy buena salud, aunque no nos han dado el bombo que a los escandinavos, por ejemplo. Lo considero injusto. Parece que si eres sueco o noruego ya escribes buena novela negra. Es como creer que todos los españoles somos toreros.
¿Qué le ha impulsado a asistir a Cartagena Negra, conocía ya estas jornadas?
Los amigos que tengo allí. Y los que vienen. Y sí, ya estuve el año pasado y lo pasé genial.
¿Qué opina del boom de festivales negros que hay en España?
En Francia es habitual. Dan mucha vidilla al género y ponen en contacto a los autores con la gente, es genial
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¿Hay algún tema que no trataría nunca en sus novelas?
Probablemente la violencia de género.
¿Cree que la realidad supera a la ficción como fuente de argumentos negros?
Totalmente, me ha ocurrido en muchas de mis novelas. A veces, los autores hasta nos quedamos cortos.
¿Qué le diría a un lector que no conozca su obra para que se acerque a sus novelas?
Que si quiere salir de esta realidad, llevar la cámara y vivir una aventura, se venga conmigo a hacer un viaje en el tiempo.
¿Cuál es, si se puede confesar, el siguiente crimen que tiene en mente?
Acabo de terminarlo, un asesino en serie, un copycat, que reproduce crímenes en Oregón ocurridos 41 años antes.
