Ha llovido un poco desde que, allá por 1991, un entonces jovencísimo Alejandro Sanz cantase eso de "son tan fuertes tus miradas, elegantes y estudiadas. Yo soy sólo un adolescente, pero entraré en tu mente pisando fuerte". Y vaya si entró.

El artista madrileño, entonces apenas una promesa, arrasó con Viviendo deprisa, su segundo disco -del primero, Los chulos son pa´ cuidarlos, renegó- y desde entonces no sólo se mantiene, sino que crece como uno de los artistas más grandes del panorama musical español. Ahora, con una legión de admiradores repartidos por todo el planeta, el cantante hace parada en la Región. Fue este jueves por la noche, en Cartagena, en el marco de su gira Sirope Vivo, en la que presentó los temas de su último álbum, que se llama precisamente así, Sirope.

El primer sencillo de este disco fue Un zombie a la intemperie, y al poco de salir ya estaba de número 1 en la friolera de 14 países. El álbum tiene otros temas que han sonado hasta la saciedad en radios, como A que no me dejas. Y otros especialmente tiernos: Capitán Tapón, canción que el descubridor de Malú dedica a su hijo.

Los asistentes al concierto no han dejado de saltar, jalear y corear todas las canciones que se han ido sucediendo durante las dos horas que ha durado el recital.

Los temas más icónicos del cantante acompañaron los temas nuevos, con un público entregado y fiel.