El jazz de Clementine viene de la calle. Sus letras, con su voz quebrada, muestran su vida, aquellos años de cuando dejó la escuela, cómo escapó de Edmonton para acabar como homeless en Candem, y cómo dos años después, ya en París, siguió durmiendo en las calles.

Así fue como empezó la noche de la 35 edición del Cartagena Jazz festival en el Nuevo Teatro Circo; primero con el recital de Benjamin Clementine y después con Silvia Pérez Cruz, que llevó a la ciudad portuaria temas arreglados para la ocasión por Javier Galiana de la Rosa, Joan Antoni Pich y ella misma. Clementine (Londres, 1988) presentó su primer trabajo At Least For Now, en el que no faltaron sus dos ingredientes principales: piano y su voz atípica.

Una voz quebrada que junto a las teclas acompañaron sus lamentos dejando al descubierto un halo de misterio.

Silvia es dulce y cautivadora y eso se demostró. Su maestría vocal asombró al público acompañada de un quinteto de cuerda, dos violines, una viola, un contrabajo y un cello.

El concierto de The Trouper's Banda, previsto para hoy, queda aplazado para el 7 de noviembre por previsión de lluvia.