La cocaína y el alcohol son las drogas más habituales entre las personas que son atendidas en los centros de deshabituación, mayoritariamente hombres mayores de 35 años, en paro y con dependencias asociadas a enfermedades mentales.

Así se ha puesto de manifiesto en la presentación de la memoria de 2010 de la Confederación de Entidades para la Atención a las Adicciones, que integra centros asociados de seis autonomías españolas, Cataluña, Euskadi, Castilla-León, Extremadura, Aragón y Comunitat Valenciana.

La portavoz de la Confederación, Estíbaliz Barrón, ha explicado que del total de personas drogodependientes tratadas el año pasado, un 45 por ciento eran consumidores de cocaína y un 21 por ciento de alcohol.

El perfil medio refleja, además, que un 86 por ciento de las personas atendidas eran hombres, un 24 por ciento tenían asociadas patologías mentales, un 55 por ciento se encontraban en paro y un 22 por ciento carecía de domicilio fijo al iniciar el tratamiento.

Otros datos que ha resaltado la portavoz como "elementos de reflexión" muestran que un 14 por ciento de los pacientes eran mujeres, un 8 % menores de 25 años, y un 12 % mayores de 48 años.

Los distintos centros de la asociación atendieron, además, a 1.001 reclusos con drogodependencias, a 2.769 familiares de pacientes, a 892 adolescentes con comportamientos de riesgo y a 1.400 familiares de adolescentes.

La memoria revela, además, que en 2.010 aumentó la atención a adolescentes en un 23 por ciento respecto al año anterior, de los que un 75 por ciento eran hombres y un 25 % mujeres.