La Ley de Universidades obligará a los alumnos a acreditar un nivel de idiomas B2

Con el objetivo de impulsar la internacionalización de los estudiantes y de los futuros profesionales, las universidades de la Región de Murcia obligarán a que sus alumnos acrediten a partir de 2029 un nivel de idiomas B2 para poder obtener el título. Así lo recoge el anteproyecto de la nueva Ley de Universidades que este viernes ha recibido el visto bueno del Consejo de Gobierno de la Región de Murcia y que de esta forma inicia el procedimiento de trámite, un texto con el que el Ejecutivo murciano quiere adaptar el sistema universitario a las necesidades y retos del siglo XXI, ya que "son ellas las instituciones que están entre los principales motores de crecimiento de la Región de Murcia".

Para que los estudiantes acrediten este nivel de idiomas, que habitualmente será el inglés, las tres universidades de la comunidad (UMU, UPCT y UCAM) deberán adaptar sus planes de estudio, lo que también permitirá generar alianzas con universidades extranjeras e impulsar los títulos conjuntos.

El texto, compuesto por 110 artículos, ocho disposiciones adicionales y cinco transitorias, responde a la necesidad de adaptar el sistema universitario regional a principios de autonomía, calidad, internacionalización, eficiencia y compromiso social. La futura ley se adapta a la legislación estatal y a las recomendaciones del Espacio Europeo de Educación Superior sin que las universidades pierdan su autonomía.

Observatorio para evitar publicidad engañosa

La futura Ley de Universidades propone la creación de un Observatorio Abierto de Datos Universitarios para evitar la publicidad engañosa y en el eje de transparencia, la ley establece la comparecencia anual de los rectores ante la Asamblea Regional, la presentación de memorias de actividad en el primer trimestre del año y que el Consejo Social elaborará planes trienales.

La norma también promueve la eficiencia del sistema mediante la complementariedad de títulos, la especialización, la cooperación entre universidades y la simplificación administrativa. Se declaran de utilidad pública las actuaciones sobre infraestructuras universitarias.

Además, el Consejo de Gobierno tendrá que autorizar la venta de patrimonio cuando supere el 1% del presupuesto de las universidades.

La nueva Ley Regional de Universidades comienza a dar sus primeros pasos

Ocho ejes para un nuevo modelo universitario

El anteproyecto se estructura en ocho ejes estratégicos. El primero de ellos, la autonomía universitaria, se refuerza a través de un modelo de financiación plurianual, estable y consensuado con las universidades públicas, que garantiza la cobertura de los costes de personal autorizado. Además, se promueve que al menos el 30 por ciento de la financiación proceda de fuentes distintas a los presupuestos autonómicos.

La internacionalización es otro eje central. Se fomentan alianzas con universidades europeas, títulos conjuntos y planes plurianuales de internacionalización y plurilingüismo. Asimismo, se requerirá a partir de 2029 una capacitación lingüística, con la acreditación de un B2 en lengua extranjera, para la obtención de los títulos y las nuevas incorporaciones al profesorado ayudante doctor. La experiencia internacional contará un mínimo del 20 por ciento en los procesos de selección docente.

En el ámbito del estudiantado, la ley crea por primera vez el Consejo de Estudiantes Universitarios de la Región de Murcia, órgano máximo de representación que integrará a estudiantes de universidades públicas y privadas. Además, se garantiza a los estudiantes de las universidades públicas el acceso equitativo a todos los recursos del sistema universitario público regional y se asegura la igualdad de oportunidades mediante el sistema de becas y ayudas al estudio, de esta forma los alumnos de UMU y UPCT podrán hacer uso indistintamente de los servicios y espacios de las dos instituciones a través de un carné. 

La excelencia investigadora recibirá un fuerte impulso. Las universidades deberán contar con programas propios de investigación, se insta a que estos centros docentes faciliten la compatibilidad de la investigación con el ejercicio de la docencia y se fija una actividad mínima investigadora o de transferencia del conocimiento del 33 por ciento de la jornada anual. En línea con ello, se fomenta la transferencia de conocimiento mediante la colaboración con el tejido empresarial, la creación de ‘spin-offs’, las microcredenciales universitarias y la formación dual y la orientación profesional de los egresados.

La nueva norma incluye la transformación del Consejo Interuniversitario en el Consejo de Universidades de la Región de Murcia y el refuerzo de los Consejos Sociales, que incluirán por primera vez a antiguos alumnos y representantes de alianzas internacionales.

Tras su aprobación por el Consejo de Gobierno, el anteproyecto inicia ahora un trámite de audiencia pública para recoger aportaciones. A continuación, se remitirá al Consejo Económico y Social, al Consejo Jurídico, y posteriormente, se iniciará su tramitación parlamentaria en la Asamblea Regional.