Caos y colas para abastecerse de linternas y velas por el apagón en la Región: "Así ensayamos para la guerra"

«Así ensayamos para la guerra», bromeaba una mujer a las puertas de una tienda cerca de la Plaza Triangular, en Murcia, donde había «bajado a comprar linternas y pilas, qué remedio», explicaba. A su lado, otra vecina preguntaba a la encargada del comercio «dónde están los cirios». «Estaba yo pensando en que, con lo del papa, no iban a quedar velas en ninguna parte, que la gente se las habría llevado todas. Pero quedan», decía.

Son las consecuencias del apagón que afecta a la España peninsular desde alrededor de las 12.30 horas de este lunes. La falta de luz eléctrica ha repercutido en todo: no hay semáforos (la Policía Local regula el tráfico), hay problemas en el transporte público y la Región de Murcia activaba primero el nivel 1 (y a las pocas horas subía al 2) del Plan Territorial de Emergencias. Lo que más preocupa a la gente, la salud: desde la Consejería de Salud insisten en que todos los hospitales cuentan con generadores para mantener la asistencia sanitaria.

"Ni cuando la covid"

Los supermercados de la Región de Murcia que continuaron con la persiana levantada después de que se produjese el apagón registraron una afluencia de gente "mayor que cuando estalló el coronavirus", apuntaban clientes y cajeros de uno de estos establecimientos, y daban cuenta usuarios, tanto en sus redes sociales (quienes podían acceder a las mismas) como en los corrillos vecinales que se formaban en las comunidades, para compartir experiencias y apelar a la solidaridad: "Vecina, cualquier cosa que necesites, me lo dices".

En las casas, muchos vecinos desempolvan antiguos transistores para estar al tanto de qué pasa, porque no van los móviles. Algunas panaderías también veían de golpe el repunte de clientes. Los supermercados que permanecían abiertos reciben un aluvión de clientes, que compran masivamente agua, latas y papel higiénico. "Esto no se ha visto ni cuando el coronavirus", insistía una joven, que guardaba la fila para pagar en un súper de Ronda Norte.

Conforme avanza la jornada, la red Wifi de alguna que otra zona va 'resucitando'. Llegan mensajes de texto que fueron enviados horas antes. Un '¿estás bien?', pone en muchos de ellos.

Todo este caos afecta a los trenes. "Se mantiene suspendido el servicio ferroviario por falta de suministro eléctrico", detallaban desde Renfe a las cuatro de la tarde. En el exterior de la estación del Carmen, en Murcia, numerosos pasajeros permanecían 'varados'.

En el ámbito político, el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, presidía, en dependencias del 112, el comité de crisis constituido. "Pido tranquilidad a toda la población ante esta situación y que se eviten desplazamientos innecesarios", insistió. También anunció la suspensión de la actividad lectiva en todos los centros educativos de la Región este lunes por la tarde, así como la actividad de los centros sociales y atención temprana. 

Y, cómo no, la situación da lugar al caldo de cultivo perfecto para elucubrar. «Dicen que se ha estrellado un avión en Francia y ha sido por eso», contaba una mujer en una esquina a su interlocutor. «Va a ser cosa de Putin», contestaba el hombre, bastante serio. 

Rescates en ascensores

Bomberos de Murcia habían recibido, hasta las cuatro y media de la tarde de este lunes, alrededor de un centenar de llamadas para alertar de que había personas atrapadas en ascensores y realizado decenas de rescates por esta incidencia: entre 50 y 60, indican desde el cuerpo.

Se movilizan, para estos servicios (que se consideran auxiliares), entre 2 y 6 efectivos.