Los inquilinos no pagarán a la agencia cuando alquilan una casa para vivir

El Colegio de Agentes de la Propiedad precisa que la obligación no rige en los pisos de vacaciones

María José Gil

María José Gil

La reforma del mercado inmobiliario que traslada a los propietarios de las viviendas la obligación de pagar las tarifas que cobran las agencias es uno de los puntos de la nueva Ley de Vivienda que está resultando más conflictivo, dado que hasta ahora eran los inquilinos los que costeaban los honorarios de la empresa que actúa como intermediaria. El portavoz del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria, Jerónimo Jover, aclara que esta obligación solo recae sobre el arrendador «cuando la casa que alquila va a ser la vivienda habitual del inquilino». Sin embargo, deja claro no se aplica en «los alquileres de viviendas vacacionales o de casas de temporada, entre las que se incluyen los pisos de los estudiantes».

En los últimos días se ha difundido en Murcia a través de las redes sociales la denuncia de una pareja que acusa a una inmobiliaria de intentar cobrarles los honorarios por la gestión del arrendamiento aduciendo que «la nueva ley no es obligatoria en Murcia» porque que el presidente regional, Fernando López Miras, ha dicho que no la aplicaría.

La polémica, que ha recogido La Opinión, ha llevado a Podemos a plantear una denuncia ante la Fiscalía para pedirle que «actúe de oficio contra las compañías que traten de vulnerar la ley y abusar de los inquilinos».

Por su parte, el portavoz del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria asegura que no tiene noticias de que el traslado de los honorarios a los propietarios haya generado quejas hasta ahora. A su juicio, la confusión sobre la aplicación de la ley puede deberse al hecho de que Murcia no está sujeta a las limitaciones en las subidas de los precios de las llamadas zonas tensionadas de las grandes capitales.

Jerónimo Jover se lamenta de que en la Región hay un millar de agencias y que solo unas 200 están inscritas en el Colegio, al tiempo que recuerda que al desaparecer la normativa que obligaba a los profesionales a cumplir una serie de requisitos y «a superar un examen» se ha producido «una desregulación del mercado», que da lugar a confusiones. «Desde el Colegio les decimos a todos que hay que cumplir la ley», asegura.

«Lo que ocurre es que el legislador no sabe lo que hacemos. Cree que nos limitamos a enseñar una casa», critica. Considera que a ningún otro profesional liberal se le dice «a quién puede cobrar y a quién no» y señala que «sienta un precedente peligroso».