Medio Ambiente

Luz verde a la partida de 20 millones para reducir pesticidas en la cuenca del Mar Menor

El Gobierno central descarta utilizar el presupuesto en ayudas directas a los agricultores y permitirá impulsar proyectos de investigación

Terrenos cerca del Mar Menor en los cuales se llevarán a cabo estas acciones.

Terrenos cerca del Mar Menor en los cuales se llevarán a cabo estas acciones. / Javier Giménez Martín

Alberto Sánchez

Alberto Sánchez

El Consejo de Ministros ha autorizado la partida de 20 millones de euros que irá destinada a mejorar la práctica agrícola en el entorno del Mar Menor. El objetivo es que se reduzca el uso de pesticidas y de fertilizantes en el regadío, así como los procesos de erosión que favorecen las avenidas de agua en la comarca. Sin embargo, esta inversión no conllevará ayudas directas a los productores para aplicar estas prácticas, como prometió en un principio el Ministerio para la Transición Ecológica

Finalmente, este dinero se destinará a fomentar proyectos de investigación que elaboren buenas prácticas agrarias y que, a su vez, contribuyan «a la transición ecológica en la agricultura y a la reducción de los impactos en origen en la cuenca vertiente del Mar Menor». Este cambio de parecer del Ministerio, desvelado por La Opinión, provocó malestar en las organizaciones agrarias de la comarca.

Tras la reunión del Consejo de Ministros de este martes, la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, manifestó que estas subvenciones que tramitará la Fundación Biodiversidad forman parte del plan de recuperación y restauración del Mar Menor que está basado en fomentar «soluciones basadas en la naturaleza, la restauración, la mejora paisajística y medioambiental en el entorno de la laguna salada murciana».

Un sector «sostenible»

Las ayudas se dirigen a la agricultura, según Rodríguez, con el objetivo de «lograr restablecer el equilibrio» entre los trabajos agrícolas, para que sean más sostenibles, y el restablecimiento del Mar Menor. «Compatibilizar la continuidad del sector al tiempo que se hace sostenible esta actividad económica», ha apuntado. Podrán optar a las ayudas organizaciones profesionales e interprofesionales agrarias y otras entidades con personalidad jurídica en el ámbito agrícola (organizaciones de productores, cooperativas, comunidades de bienes agrarias, etc.), así como entidades locales, entidades sin ánimo de lucro y entidades científicas, que «tiene un papel clave en la búsqueda y aplicación de soluciones innovadoras a los problemas que padece el Mar Menor».

Según ha recordado, esta línea forma parte del Plan Marco de Actuaciones para la recuperación del Mar Menor que ya ha abordado otras restauraciones relacionadas con el uso de la minería, el uso del agua en entornos urbanos y, ahora es el turno del ámbito de la agricultura, apunta.

Reducir agroquímicos

La iniciativa pretende obtener resultados «ambiciosos» en aspectos como la reducción de aportes de agroquímicos, de fertilizantes orgánicos, de los retornos de riego y de los procesos erosivos. Con ello, se busca mejorar la calidad del suelo y reducir la demanda de recursos hídricos, para lograr una mejora ambiental y de biodiversidad en el ámbito agrario de la cuenca vertiente del Mar Menor.

Criterios técnicos y ambientales

Los proyectos seleccionados se tendrán que desarrollar en la superficie agrícola dentro de la cuenca vertiente del Mar Menor en los municipios de San Pedro del Pinatar, San Javier, Los Alcázares, Torre Pacheco, Fuente Álamo de Murcia, Cartagena, La Unión, Murcia, Mazarrón y Alhama de Murcia.

La gestión de la convocatoria corresponderá a la Fundación Biodiversidad y las ayudas oscilarán entre los 300.000 y 2 millones de euros a iniciativas que podrán tener una duración de tres años desde la concesión de las mismas.

La selección de los proyectos se realizará en régimen de concurrencia competitiva, atendiendo a criterios técnicos, estratégicos, ambientales y sociales. Las ayudas permitirán el desarrollo de diferentes acciones, tales como la utilización de Soluciones basadas en la Naturaleza (SbN) y la implementación de buenas prácticas agrarias.