La Inspección sancionó a 25 empresas el verano pasado por no prevenir los golpes de calor

La Inspección de Trabajo sancionó el verano pasado a casi una treintena de empresas de la Región por no tomar las medidas necesarias para evitar que sus trabajadores estuvieran expuestos al estrés térmico y a agentes ambientales adversos, como el viento. Unas 25 multas fueron impuestas a compañías de la agricultura y de la construcción en las que se detectó el riesgo de un golpe de calor, mientras que alguna otra estuvo motivada también por la falta de protección frente al frío en los centros de trabajo que cuentan con cámaras frigoríficas, según ha informado el director territorial de la Inspección de Trabajo, Fernando Vélez.

El pasado 13 de mayo entró en vigor la reforma de la normativa que regula la prevención de riesgos laborales introducida por el Ministerio para prohibir el trabajo al aire libre en días de alerta por calor extremo, que fue aprobada por el Consejo de Ministros junto con las medidas destinadas a paliar los efectos de la sequía.

La disposición publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) recuerda que «las altas temperaturas de estos últimos años le costaron la vida, entre otros dramáticos casos, a un trabajador del campo de Murcia, en Lorca, que ni siquiera tenía a su disposición agua o medio de hidratación alguno». Se trata de un jornalero que fue abandonado a las puertas del centro de salud de Sutullena en el verano de 2020. 

El Juzgado cita a un testigo más de dos años después de la muerte del jornalero por golpe de calor

El texto recogido en el BOE también aludía al empleado de la limpieza de 60 años que murió en el barrio madrileño de Vallecas el pasado verano.

Antes de que empezara a aplicarse la prohibición auspiciada por el Ministerio de Trabajo, la Inspección de Trabajo ya venía desarrollando campañas en los sectores más expuestos a los golpes de calor para verificar el cumplimiento de las normas de prevención y asegurar la adopción de medidas que eviten la exposición a las altas temperaturas.

Las temperaturas causaron en 2022 dos accidentes graves y tres leves

Según los datos ofrecidos por Fernando Vélez, los inspectores realizaron el pasado verano en la Región 315 actuaciones durante los meses en los que se registran temperaturas más elevadas, que se desarrollaron en cerca de 300 empresas. 

Hicieron, además, 284 requerimientos para la subsanación de las deficiencias encontradas.

Las infracciones detectadas dieron lugar a casi una treintena de sanciones, el 90% de las cuales fueron impuestas a empresas del sector agrario y de la construcción por no tomar medidas para evitar los golpes de calor.

No obstante, alguna de las actas de infracción estaba motivada por la falta de protección frente al frío en centros de trabajo que tienen cámaras frigoríficas.

Aunque la agricultura y la construcción concentran la mayor parte de las actuaciones, las inspecciones estuvieron dirigidas también a establecimientos con cocinas industriales o con otro tipo de actividades que dan lugar a unas temperaturas elevadas, como las lavanderías.

También se detectaron irregularidades en empresas en las que el peligro estriba en la exposición al polvo o a otros agentes ambientales.

Las empresas deben asegurar a los trabajadores zonas de sombra en las que puedan resguardarse del sol y agua fresca para evitar el riesgo de deshidratación. A partir de ahora también estarán obligadas a suspender la actividad cuando la Aemet haya anunciado una alerta por altas temperaturas  en las horas de más calor.

Tras la entrada en vigor de la reforma publicada en el BOE el pasado 12 mayo, la prohibición de trabajar en los días de calor extremo se extiende también a los medios de transporte utilizados fuera de la empresa, así como a lugares de trabajo situados dentro de los medios de transporte, obras de construcción temporales o móviles, industrias de extracción y buques de pesca, entre otros.

Peligro adelantado

El calor provocó cinco accidentes el verano pasado, aunque no llegó a causar ninguna víctima mortal. Según los datos de la Dirección General de Trabajo, en 2022 se registraron dos casos graves y tres leves.  

El Gobierno central calcula que el calor pudo causar 4.800 muertes el pasado año en toda España.

El peligro que entrañan las altas temperaturas especialmente en el campo y en la construcción se ha adelantado este año. La ola de calor registrada en la Región el pasado mes, apenas un mes después del inicio de la primavera, ha llevado a la Inspección de Trabajo a adelantar a abril el inicio de la campaña de prevención contra los golpes de calor, que en años anteriores se ha iniciado en la segunda quincena de mayo. Los inspectores empezaron a visitar las industrias y los negocios en los que existe una mayor exposición, como las panaderías y pastelerías y las cocinas de los hoteles y de los establecimientos de catering. Las empresas agrarias y de la construcción sostienen que desde hace años vienen adelantando la jornada laboral e incluso empezando a trabajar de noche en los invernaderos para evitar el trabajo en las horas centrales del día.