La Semana Santa ofrece unas previsiones "inmejorables" para la hostelería, pero la patronal calcula que los bares y restaurantes necesitarían contar con un 40% más de personal para asumir el aumento de la actividad que se producirá a partir de este fin de semana. El presidente de la Asociación de Bares de HoyTú, José María Rubiales, asegura que en zonas de la costa como La Manga hay bares y chiringuitos que no van a abrir la próxima semana porque el coste del alojamiento hace más difícil todavía encontrar camareros y cocineros.

Los hoteles tienen menos problemas para encontrar personal en estas fechas, porque cuentan con empleados fijos discontinuos a los que contratan en temporada alta. Por su parte, la Consejería de Turismo prevé que el movimiento de visitantes durante las fiestas aportará unos ingresos de 60 millones de euros a la economía regional.

Las elevadas temperaturas que está registrando la Región en el mes de marzo constituyen el mejor reclamo para atraer a los visitantes en las vacaciones que se inician el próximo fin de semana, aunque la mayor parte de los desplazamientos se producirán entre el Jueves Santo y el Domingo de Resurrección. Los termómetros están rozando los 30 grados centígrados e incluso los superan algunos días desde que se inició el mes de marzo, lo que permitía ver playas llenas de bañistas incluso este lunes en las proximidades de Cartagena.

La Consejería de Turismo considera que las expectativas para la hostería resultan "inmejorables", tal y como publicó La Opinión, aunque las dificultades para encontrar camareros y cocineros ensombrecen en este momento las posibilidades que ofrece el sector de la hostelería en la primera Semana Santa sin restricciones después de tres años con limitaciones de algún tipo debido a la covid.

El presidente de la Asociación de Bares de la federación regional de hostelería HoyTú asegura que los establecimientos de Cabo de Palos y de otras playas "están a reventar los fines de semana", por lo que prevé que en las próximas fiestas se quedarán sin subir la persiana "bares y chiringuitos de las playas, que no van a poder abrir".

José María Rubiales explicó que el problema del alojamiento complica aún más las dificultades para encontrar mano de obra en las poblaciones costeras que en están a punto de entrar en temporada alta debido al elevado coste de los alquileres, aunque intentan encontrar personal en las poblaciones próximas. "Hay empresarios que tienen apartamentos alquilados todo el año" para alojar a los trabajadores, apuntó.

Rubiales atribuye la escasez de mano de obra a la fuga de trabajadores a otros sectores que se produjo durante la pandemia debido "a los tres cierres de la hostelería" decretados en la Región por la Comunidad Autónoma para evitar la propagación del coronavirus.

"Hace falta gente más preparada. Antes ibas a las escuelas de hostelería de la Región y encontrabas camareros y cocineros, pero ahora no hay", se lamenta.

A su juicio, sería necesario que las consejerías de Educación y de Turismo diseñaran un plan de formación capaz de dar respuesta a las carencias que viene arrastrando la hostelería

Por su parte, los sindicatos aseguran que muchos profesionales se han marchado a las comunidades autónomas vecinas, en las que hay en vigor convenios colectivos con sueldos superiores a los que pagan las empresas de la Región.

En los hoteles la situación no es tan complicada, según explicó a La Opinión el presidente de la Asociación de Hoteles de la patronal HoyTú, Bartolomé Vera, dado que "tienen estructuras más fijas". Aunque los establecimientos hoteleros también esperan alcanzar una ocupación de entre el 90% y el 95% en la Semana Santa, Vera señaló que cuentan con empleados fijos discontinuos a los que pueden recurrir en temporada alta. No obstante, reconoció que "es cierto que desde la pandemia falta personal".

Sin embargo, la Región cerró febrero con cifras históricas de empleo turístico y fue la comunidad con mayor aumento relativo de afiliados a la Seguridad Social en el sector de la hostelería y las agencias de viajes. El pasado mes alcanzó los 42.826 trabajadores de alta, lo que supone un aumento 8,6% respecto a 2019.

Por otra parte, la Consejería de Turismo calcula que la actividad de la hostelería que se producirá en torno a las procesiones y a las celebraciones religiosas y las pernoctaciones previstas en los hoteles y en las viviendas de segunda residencia previstas durante las próximas vacaciones aportarán unos ingresos estimados en unos 60 millones de euros a la Región.

Turismo dice que la formación es prioritaria en su Plan Estratégico

La Consejería de Presidencia, Turismo y Cultura asegura que la formación de los trabajadores de la hostelería "constituye uno de los puntos fundamentales del Plan Estratégico de Turismo 2022-32, que se centraliza desde el Centro de Cualificación Turística (CCT), dependiente del Itrem, donde se imparten cursos de cualificación profesional del SEF, tanto presencial como online".

Añade que la formación reglada se gestiona desde la Consejería de Educación, Formación Profesional y Empleo, de la que dependen las escuelas de hostelería.

Según los datos de Turismo, la programación del CCT en el primer semestre de este año comprende 58 cursos, con 2.391 horas, en los que participarán 1.316 alumnos. La formación incluye cursos de inglés profesional para servicios de restauración, camarero de banquetes, atención al cliente en sala, operaciones básicas de restaurante y bar, entre otros, de acuerdo con las necesidades de las empresas. La Consejería precisa que los cursos del CCT se imparten también en distintos municipios de la Región.