La CHS restaurará los Saladares del Guadalentín

La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), a través de la Comisaría de Aguas, ha iniciado los trabajos de restauración medio ambiental en el Espacio Protegido de los Saladares del río Guadalentín en el término municipal de Totana (Murcia).

El objetivo de esta restauración ambiental es la recuperación de la vegetación característica de este tipo de ecosistemas en detrimento de las especies exóticas invasoras presentes hasta el momento de la actuación, como lo es por ejemplo la caña común (Arundo Donax). De esta manera aumenta el grado de naturalidad de este espacio.

En este sentido, con la plantación a realizar se pretende conseguir una banda de vegetación propia de saladar que, a su vez, contribuirá a aumentar la estabilidad en la margen del cauce.

Por otra parte, la sustitución de la masa de vegetación existente por ejemplares típicamente presente en un saladar se protege el régimen de corrientes y se mejora el funcionamiento hidráulico en las situaciones de avenidas ordinarias.

La contaminación química del agua pone en peligro a las aves de los Saladares del Guadalentín

Cabe señalar que estos trabajos de restauración ambiental se van a llevar a cabo mediante el desbroce para recuperación del canal de aguas bajas existente.

Además, esta iniciativa prevé la plantación de especies de ribera autóctonas que quedarán protegidas del tránsito de ganado de la zona mediante vallado cinegético. Asimismo, esta actuación se realiza gracias a la colaboración técnica con la Consejería de Agricultura de la Comunidad.

Actuaciones en Molina de Segura

El delegado del Gobierno, José Vélez, ha anunciado que el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, visitará próximamente Molina de Segura para anunciar el inicio de las obras de otra «reivindicación histórica» de la localidad, el colector-interceptor de aguas pluviales y adecuación de la rambla del Chorrico.

Este proyecto se encuentra en fase de evaluación de impacto ambiental simplificada e incluye un plazo de ejecución de doce meses, con un presupuesto base de licitación de 10,7 millones de euros.

Respecto a las obras de laminación de las cañadas de Mendoza y Morcillo, el plazo de ejecución es de dos años, aunque los trabajos estarán concluidos en un año. El tiempo restante servirá para el mantenimiento de la vegetación plantada.