La Marea Blanca prepara una primavera caliente en defensa de la sanidad pública

A falta de concretar una fecha, que se mueve entre final de abril y principios de mayo, las organizaciones sociales, vecinales y sanitarias que componen la Marea Blanca tienen claro que «hay que salir a la calle» esta primavera para defender la Sanidad pública de la Región de Murcia con una gran manifestación en Murcia y concentraciones en cada una de las nueve áreas de salud.

Tras casi dos horas en las que los representantes de una treintena de entidades han compartido en la noche de este lunes la realidad de las diferentes áreas en una asamblea convocada en el Colegio de Enfermería de Murcia, la conclusión de todos ellos es que «los derechos se ganan en la calle» y ponen en cuarentena las últimas promesas del Gobierno regional en el ámbito sanitario, al no confiar en que sean suficientes para resolver la situación «en el caso de que se pongan en marcha».

Tres meses de espera para ver a un joven que se ha autolesionado en salud mental tras una primera atención en urgencias, dos semanas para una cita con el médico de familia en Yecla y un año para la consulta del neurólogo, así como más de un año de demora para tramitar una solicitud de dependencia a una persona mayor son algunas de las muchas gotas que han colmado el vaso y que fueron puestas de relieve en el encuentro.

Federaciones vecinales de Murcia, Cartagena, Lorca, Yecla y el Noroeste, sociedades de medicina de familia, enfermería pediátrica, salud mental, colegios profesionales como los de enfermería y fisioterapeutas, Usuarios de la Sanidad, plataformas de celadores, de atención temprana, de Defensa de la Sanidad Pública, Murcia Acoge, Amnistía Internacional, organizaciones sindicales como UGT, CCOO y SPS, así como los yayoflautas, entre muchos otros, coinciden en que «hay que implicar a profesionales y usuarios para que ni unos ni otros se vean solos, ya que esto nos afecta a todos», afirma María Jesús de Seapremur.

La decana de los fisioterapeutas reclama más profesionales en la Sanidad pública «para que los pacientes no tengan que pagarse la rehabilitación en una clínica privada por las listas de espera», con sólo 200 fisioterapeutas en la red pública.

Julián del Pozo, vocal de sanidad de los vecinos de Cartagena, critica que se dejen plazas de médicos de baja sin cubrir y la continua imagen de camas en los pasillos. Al tiempo que se pregunta «de dónde van a sacar los médicos que les han prometido a Cesm si la respuesta siempre es que no hay profesionales para contratar».

Desde Usuarios de la Sanidad, Teresa Martín, afirma que «la sociedad nos reclama movilizaciones porque la percepción del ciudadano es que se está desgastando a los profesionales y se está resintiendo la atención».

Privatización indirecta

Juan Antonio Sánchez, de la Asociación de Defensa de la Sanidad Pública (ADSP), considera que «hay que dar respuesta» a las 86.000 personas que hay pendientes de una consulta o una prueba y no disponen ni tan siquiera de una cita. Y aunque reconoce que «la actitud del PP de Murcia no es la actitud del PP de Madrid, existe una privatización indirecta de muchas prestaciones como es el caso de la interrupción voluntaria del embarazo».

Desde Yayoflautas han iniciado ya una recogida de firmas e insisten en que «queremos que nuestro dinero vaya a la Sanidad pública, quien quiera privada que se la pague», dice Pedro Cano.

También de ADSP Abel Novoa hizo una radiografía de la situación de las personas mayores en la Región, llegando a decir que «tenemos a los ancianos más enfermos, más pobres y con menos ayudas sociales de España». Mientras que desde las AMPAS reclaman más recursos en salud mental para ayudar a niños y adolescentes en los colegios.

Un malestar, un caldo de cultivo, del que saldrá en breve una fecha con la que quieren inundar Murcia de una marea blanca en defensa de la sanidad.