El Ministerio para la Transición Ecológica ha dado luz verde a otras dos plantas solares de grandes dimensiones en Mula promovidas por el grupo Cobra, empresa que ya gestiona otro huerto solar en el municipio, una de las más grandes de la Región de Murcia. Los nuevos proyectos ocuparán un espacio de 537 hectáreas y tendrá una potencia de 265 megavatios.
El departamento de Teresa Ribera está acelerando en las últimas semanas las declaraciones de impacto ambiental de los parques solares de más de 50 MW que deben pasar los trámites en la Administración central. El lunes aprobó dos parques fotovoltaicos en Murcia y Torre Pacheco. En este caso, el proyecto afectará a 394,27 hectáreas de frutales como almendros y olivos, 82,37 hectáreas de tierras de labor de secano, y 31,57 hectáreas de pastizales naturales.
El Ayuntamiento de Mula puso objeciones al proyecto ya que calificó el impacto de las dos plantas como "medio-alto" debido a la "elevada superficie de ocupación de la planta, lo que supone una fragmentación y pérdida de hábitat, sobre todo para las aves". El promotor indicó que sus plantas "no suponen un problema de conectividad" ecológica ya que estas podían supone "una isla refugio para muchas especies de fauna de las Zonas de Especial Protección para las Aves" de las proximidades.
La empresa añadió además que "la escasa relevancia" de los animales presentes en esta zona ante la queja de los vecinos de Fuente Librilla, que denunciaron que "la eliminación de las zonas agroforestales afectará a multitud de especies de avifauna, pues la zona de implantación se trata de una importante área de campeo y alimentación para aquellas especies que habitan en Sierra Espuña". Los estudios previos de la multinacional determinaron que las plantas "no se encuentran espacios naturales protegidos en el ámbito de estudio ni en su entorno más inmediato, siendo el más cercano el paisaje protegido 'Barranco de Gebas'", a dos kilómetros de una de los huertos fotovoltaicos.