Marín: "Intensificaré el diálogo con toda la comunidad educativa"

Víctor Marín afronta para lo poco que queda de legislatura borrar los conflictos creados por la exconsejera expulsada de Vox, Mabel Campuzano, con la comunidad educativa y unir un puente entre la Formación Profesional y su continuidad con las políticas de empleo, como demanda el tejido productivo de la Región. El nuevo consejero muestra «una predisposición al diálogo», que promete «intensificarlo con toda la comunidad educativa», con las puertas de su departamento «permanentemente abiertas» para «lograr el máximo consenso». Una tarea «compleja» esta última, lo reconoce, pero que debe ser «relevante».

El recién estrenado consejero buscará volver a la senda del entendimiento con «sindicatos, familias, directivos» y toda la comunidad educativa, parte de ella muy crítica por el trato a la pública dado por la Consejería en los últimos años.

La ordenación de competencias en la consejería deberá ir encaminado a «mejorar la empleabilidad de los jóvenes» en una comunidad con altas tasas de abandono y fracaso escolar. Marín habla de incrementar las plazas de FP, ajustar la oferta a la demanda de las empresas y priorizar el bilingüismo en la formación dual.

«Modernizar las infraestructuras de nuestros centros públicos será otra de las prioridades», señala Marín, como también la «mejora en la atención a la diversidad y la mayor atención individualizada a nuestros estudiantes». En materia de salud mental, el consejero quiere impulsar el seguimiento del alumnado en las aulas para garantizar su «bienestar emocional».

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La publicación de todos los currículos ha sido una tarea de Marín hasta ahora siendo director general, un trabajo «que hemos culminado prácticamente en virtud del uso de nuestras competencias para minorar aquellos aspectos que nos parecían lesivos», en referencia a la parte del Ministerio.

El consejero ha celebrado las políticas adoptadas hasta ahora por el Gobierno regional para «garantizar la libre elección de centro», punta de lanza de las reivindicaciones del Partido Popular en materia educativa. Marín ha cumplido un perfil muy técnico que se ha visto complementado con un papel más centrado en la política desde que asumió la secretaría de Educación en la ejecutiva regional de los populares.

El "talante técnico" de Marín le brinda una buena acogida

Es difícil encontrar una opinión completamente negativa sobre el nuevo consejero de Educación, un «técnico» en la sombra de la exconsejera Mabel Campuzano que se ganó a los equipos directivos y profesores con su trabajo durante la pandemia. «Es una persona que sabe todo lo concerniente a la Consejería, y además es docente, buena persona y muy trabajador», destacan desde la Asociación Regional de Equipos Directivos (Direcmur). Entre los directores de Secundaria, su presidenta Isabel Saturno señala la «capacidad de diálogo» que tiene y pide para los próximos meses cerrar la organización del curso que viene ante los cambios en la enseñanza que trae la ley Celaá. En la FAPA Juan González, aunque agradecen su disposición siempre a hablar con las familias, tachan este movimiento en Educación como un «cambio político» sin posibilidad de mejoras hasta las elecciones de mayo. La federación le pone deberes: más atención a la salud mental, cubrir las bajas, reforzar las plantillas y abandonar los últimos puestos de la lista en abandono escolar.

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«Acierto» en unir Empleo y FP

Juan Antonio Pedreño, presidente de Ucoerm, ve el nombramiento de Marín «como la mejor solución» para la Consejería: «Es un acierto unir empleo con Formación Profesional. Él es un profesional comprometido con el mundo educativo». Francisco José Hernández, director del centro integrado de FP Carlos III de Cartagena, ve como retos del nuevo consejero el desarrollo de la nueva ley de FP, un plan de revisión de instalaciones y actualizar los equipos de trabajo, dotar a los centros de nuevos ciclos y cursos de especialización acorde con la demanda del tejido empresarial, impulsar los centros integrados de FP «como punta de lanza en la investigación e innovación profesional» o revisar los horarios lectivos de los docentes para impulsar las horas de investigación. Desde SIDI apuntan a su «talante técnico», del que esperan que ayude en las negociaciones para mejorar las condiciones laborales. En ANPE señalan del nuevo consejero que «conoce perfectamente nuestros centros y a sus docentes, sus debilidades y fortalezas, desde su posición como profesional y como político». Comisiones Obreras le reclama revertir los recortes en Educación y reforzar las plantillas que atienden a los alumnos con necesidades especiales.