Medio ambiente

Las granjas de cerdos deberán tapar las balsas de excrementos antes de 2025

El Gobierno regional actualizará la vieja normativa sobre explotaciones porcinas de 1996 para adaptarla a las nuevas exigencias en bienestar animal y medioambiental -1.350 granjas murcianas deberán recortar las emisiones contaminantes y se buscará reducir los tiempos administrativos

Granja de cerdas reproductorasen Lorca.

Granja de cerdas reproductorasen Lorca. / Solete SlowPhoto

Alberto Sánchez

Alberto Sánchez

Las más de 1.350 granjas de cerdos que existen en la Región de Murcia están llamadas a pasar por un cambio completo en su actividad para adecuarse a las nuevas exigencias que marca la Unión Europea y España en materia de higiene, sanidad y bienestar animal, medio ambiente y cambio climático. La lucha contra las emisiones de gases nocivos a la atmósfera o la reducción de la contaminación de los suelos y aguas subterráneas por los excrementos obligará a una reconversión seria de las explotaciones. Hay una fecha tope en el horizonte con la que deben trabajar todos los ganaderos: 2025.

Hace casi tres años el Gobierno central aprobó una nueva normativa estatal que regulaba la ordenación de las granjas de porcino, dando más peso al control de purines, formación de los trabajadores y el papel de los veterinarios en las instalaciones. Todo parte de las directivas europeas, a las que España debe adaptarse para rebajar, por ejemplo, el nivel de partículas tóxicas y compuestos orgánicos que se emiten desde las explotaciones. Hace un mes se cerró el círculo de la regulación estatal al publicarse las técnicas que ayudarán a los ganaderos a evitar estas emisiones, y ahora le toca el turno al Gobierno regional.

La Consejería de Ganadería prepara una nueva normativa que regulará la actividad profesional en las explotaciones porcinas intensivas y que sustituirá a la ya obsoleta orden autonómica de 1996. «Nuestra normativa actual está ahora sobrepasada y nos debemos adecuar al real decreto de 2020», señala Francisco Espejo, director general de Ganadería, Pesca y Acuicultura, «a partir de ahora abriremos un periodo de conversaciones con el sector ganadero para consensuar las modificaciones».

El foco del problema hasta ahora ha estado en la gestión del estiércol en las granjas o el crecimiento de la cabaña ganadera de porcino en la Región: casi 2,5 millones de cerdos al año. Para el primer escenario, donde se han visto varios casos de vertidos de purines desde las balsas en comarcas como el Campo de Cartagena, la nueva norma obligará impermeabilizar las balsas para evitar el riesgo de infiltración pero también a cubrirlas para reducir las emisiones. A su vez, deberán cambiar la alimentación del ganado para evitar más emisiones de amoniaco al aire.

La Consejería pide garantizar la protección del suelo ganadero 

Las organizaciones agrarias llevan batallando desde hace unos meses con las administraciones regional y local para garantizar la supervivencia de las granjas que se han visto afectadas por la expansión de las ciudades y pueblos. El suelo donde hoy se levantan pasó de considerarse como ‘rural’ a ‘residencial’ y esto ha provocado limitaciones en el crecimiento de las explotaciones. También, incluso, ha generado una inseguridad jurídica que los ganaderos quieren evitar para ser sancionados por su actividad. 

La Federación de Municipios de la Región de Murcia ya tiene por escrito la queja oficial de las organizaciones Asaja, Coag y Upa, y quedará por comenzar las posibles reuniones con la Consejería de Fomento, que tiene las competencias en la ordenación del territorio y quien podría establecer una norma supramunicipal. 

El director general de Ganadería, Francisco Espejo, pide «proteger el suelo ganadero y garantizar la supervivencia» de los granjeros para que estos puedan subsistir. Por ello, de las posibles citas que se produzcan entre Fomento, la Federación de Municipios y el sector, Espejo reclama tener «en cuenta a este sector económico importante» para dar «certidumbre» tanto a los ganaderos como a los ayuntamientos. 

Formación necesaria

En líneas generales, los ganaderos deberán acometer cambios importantes en las infraestructuras, los equipamientos, las condiciones higiénico-sanitarias de las granjas y en su personal antes de 2025. Desde este mismo año, los propietarios deben garantizar una formación completa de todos los trabajadores. Estos deberán conocer las enfermedades que afectan al ganado, las técnicas de higiene, medicamentos e incluso las estrategias que se seguirán para cumplir con los requisitos ambientales.

En España, el sector porcino se encuentra bastante regionalizado, concentrándose la actividad principalmente en las comunidades autónomas de Cataluña, Aragón y Castilla y León, siendo la Región de Murcia la quinta comunidad autónoma tras las mencionadas y Andalucía.

Los empresarios deberán garantizar una formación completa de todos los trabajadores en materia de higiene

Sistema integral

Durante los próximos dos años los productores no solo deberán cumplir lo que marca la normativa estatal y que se acaba reflejando en la nueva orden regional, sino también con las exigencias respecto al estiércol marcadas por la normativa de las zonas vulnerables a la contaminación por nitratos. «Habrá una reconversión completa del sector», reconoce Espejo, que espera poder, con las nuevas reglas, aligerar las tramitaciones administrativas para que «a la hora de presentar documentos o presentación de solicitudes todo sea mucho más rápido».

El director general destaca, entre las novedades, la implantación del Sistema Integral de Gestión de las Explotaciones de ganado porcino, que deberá ser elaborador por el veterinario de la explotación y recogerá los planes de gestión ambiental, bioseguridad, control de ruidos, polvo u olores, producción y gestión del estiércol o de bienestar animal que deberán tener todas las granjas. Con esto, «la figura del veterinario gana más peso» en las explotaciones.

Los productores tendrán que cambiar la alimentación de los animales para reducir los gases nocivos

"El sector porcino está bien preparado para afrontar los cambios"

Dos años de cambios profundos en el sector ganadero puede suponer un golpe importante para algunas explotaciones. El director general de Ganadería, Francisco Espejo, asegura que esta actividad ya venía de estar «extremadamente regulada y con controles de Salud Pública», pero lo que llega en cuanto a la ordenación de las explotaciones porcinas es «un hito» por la formación que deberán tener los profesionales, el control sobre toda la producción ganadera y la vigilancia de los purines. «El sector ganadero porcino es muy importante en la Región de Murcia y está preparado para afrontar los cambios», subraya Espejo.

Sin embargo, sí señala que los cambios que haya que afrontar puedan suponer un problema para determinados pequeños y medianos ganaderos. «Es posible que haya ganaderos que no quieran realizar los cambios o no puedan y prefieran quedarse fuera», ya que los gastos económicos que llegan con la nueva normativa implicaría, tal y como ha denunciado el sector, el cierre de algunas explotaciones.

Pide a los ganaderos de la Región que revisen y opten por llevar a cabo las mejores técnicas disponibles para afrontar la reducción de emisiones de gases contaminantes que pide la Unión Europea. Espejo apunta a que las normas ambientales que llegan «son fundamentales» y que marcarán «el día a día de la ganadería» en la Región ante una «reconversión» necesaria. La nueva normativa regional se encuentra ahora en exposición pública para recoger las aportaciones de los interesados.

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