La Comunidad Autónoma solo perdonará el Impuesto de Patrimonio a los ricos que tienen hasta 3,7 millones de euros. Los propietarios de las fortunas que superen está cifra seguirán pagando el tributo, según ha anunciado el consejero de Hacienda, Luis Alberto Marín, en la presentación de los Presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2023, que han sido aprobados esta mañana en un Consejo de Gobierno extraordinario y que esta misma tarde entregará en la Asamblea Regional.

Aunque el presidente del Gobierno regional, Fernando López Miras, había anunciado la eliminación de Patrimonio en un congreso de los empresarios, los Presupuestos han puesto un techo a las bonificaciones.

El límite se establece en 3,7 millones de euros que es la cantidad a parir de la cual empieza a aplicarse el nuevo impuesto a la riqueza establecido por el Gobierno central para las grandes fortunas.

De esta forma el Ejecutivo regional evita que la tributación de los contribuyentes con mayor patrimonios se la quede el Estado íntegramente. 

El Ministerio de Hacienda descontará a los contribuyentes la tributación que paguen Patrimonio en las comunidades que mantengan el Impuesto y ese dinero se quedará en las arcas regionales.

No obstante, las bonificaciones establecidas supondrán un ahorro de 15 millones de euros para 3.900 contribuyentes.

El consejero de Hacienda no ha precisado cuánto dinero aportará la recaudación del impuesto en 2023. El último dato conocido es el de 2020, cuando ascendió a 27,2 millones repartidos entre 4.500 declarantes.

Hasta ahora los contribuyentes empezaban a tributar por Patrimonio a partir de los 700.000 euros. En 2023 dejarán de pagar los que tengan hasta 3,7 millones.