Se llamaba Francisco Solano y era vecino de Cartagena. Es la primera víctima del franquismo identificada durante la primera fase de exhumaciones y excavaciones en el cementerio de Sant Francesc, en Formentera. El hombre, que era panadero, estuvo en la colonia militar de La Savina. Los restos fueron localizados en el mes de abril, tal y como confirma la Conselleria de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, en el marco del Tercer Plan de Fosas del Govern de Baleares.

La identificación del cartagenero ha sido posible gracias a la comparación genética entre sus restos óseos y una muestra de una de sus hijas, una prueba llevada a cabo por el laboratorio BIOMICs de la Universidad del País Vasco (Vitoria-Gasteiz).

Francisco Solano nació el 13 de diciembre de 1902 en Cartagena, estaba casado con Dolores Fernández y tenía seis hijos. Murió el 7 de julio de 1942, con 39 años, a consecuencia de la caquexia -una extrema desnutrición con una alarmante pérdida de masa muscular esquelética- y de una tuberculosis pulmonar. Su fallecimiento ha sido datado por el historiador ibicenco Antoni Ferrer Abárzuza.

Ficha de Francisco Solano. Archivo General de la Región de Murcia

Tal y como relata su nieto en una entrevista, al cartagenero lo detuvo la Guardia Civil al salir del trabajo y nunca más se supo de él. Era de "ideas republicanas, pero no llegó a estar en el frente". Sin embargo, su jefe que era "de la parte de Franco" lo denunció. Más tarde, cuando el dueño de la panadería enfermó de cáncer, pidió perdón a la familia por haberlo hecho, aunque el daño ya era irreversible.

Francisco Solano estuvo, antes de pasar por el penal de Formentera, en la cárcel de San Antón (Cartagena). Un vecino de Los Dolores que coincidió con él en la prisión balear cuenta que pasaban tanta hambre que acababan comiendo vómitos o heces propias y de compañeros.

¿Qué fue La Savina?

La Savina fue una cárcel franquista, también conocida como La Colònia o El Campament, en la que se recluía a los presos ya sentenciados por tribunales militares. Por ella pasaron alrededor de 2.000 reclusos de todos los puntos de España.

Según los estudios, las condiciones de vida eran "deplorables", y destacaba el "hacinamiento, la insalubridad, las enfermedades y el hambre", situación que causó la muerte de, al menos, 58 personas. Quienes eran condenados a penas inferiores de 12 años podían salir del recinto para llevar a cabo trabajos y tareas. Todos los fallecidos de la prisión -que cerró en 1942, al parecer, para evitar que trascendiera a otros países la situación que se vivía allí- fueron enterrados en el mismo cementerio en el que se ha exhumado el cuerpo del cartagenero.

Excavaciones en el cementerio de Formentera. CONSELLERIA DE TRANSICIÓ ENERGÈTICA, SECTORS PRODUCTIUS I MEMÒRIA DEMOCRÀTICA

"Cuando se producía una muerte, el cuerpo del finado era trasladado en carro, desde el penal y hasta la puerta de la iglesia, donde el párroco rezaba un responso ante el ataúd y de ahí seguían al cementerio (...) A veces se ponía más de un cadáver en el mismo ataúd", dicen varios de los testimonios recogidos en el informe.

El objetivo del Govern en esta fase del plan era localizar a un mínimo de 58 víctimas del franquismo que pasaron por la misma prisión y se han recuperado seis cuerpos que concuerdan con las características de los encarcelados. El cartagenero ha sido el primer identificado.

Durante la segunda intervención, a la que se procederá en los próximos meses, se buscarán a otras víctimas dentro del Cuarto Plan de Fosas del Govern (2022-2023), tal como aprobó este año la Comisión Técnica de Fosas y Desaparecidos.