La Comunidad Autónoma aumentará el gasto del próximo año casi un 10 por ciento. La Administración regional podrá disponer de 5.943 millones de euros, 532 más que en 2022, según ha avanzado el consejero de Economía, Hacienda y Administración Digital, Luis Alberto Marín, tras la reunión del Consejo de Gobierno en la que se ha aprobado el techo de gasto de 2023.

Las cuentas del próximo año alcanzarán una cifra récord gracias a los ingresos extraordinarios que aporta la liquidación presupuestaria del año 2021 como consecuencia de la recaudación de impuestos imprevista que ha generado la inflación. El consejero ha dicho que la mayor disponibilidad de recursos permitirá aumentar las inversiones y mejorar la dotación de los servicios públicos.

El techo de gasto, que contiene las grandes cifras de ingresos de la Administración regional para el próximo año, constituye el paso previo a la aprobación de las cuentas.

Una vez que sea aprobado por la Asamblea Regional, el Ejecutivo podrá cerrar los Presupuestos Generales de la Comunidad para 2023 y remitirlos al Parlamento autonómico para su tramitación.

La estimación de ingresos del próximo año responde a una previsión del crecimiento del PIB regional del 0,9 por ciento, muy por debajo del calculado por el Gobierno central para los presupuestos generales del Estado, del 2,1 por ciento, a pesar de que las principales entidades económicas sitúan ese crecimiento en una horquilla más pesimista, de entre el 1,5 y el 0,7 por ciento.

Así, Murcia tenía en 2019 un PIB de 32.287 millones, terminará 2022 con 34.650 millones de PIB, y la previsión para 2023 es de 36.535 millones.

En cuanto a la evolución del empleo, la previsión es que la Región logre su récord de cotizantes en 2023 con 628.790, un incremento de casi 45.000 más que en 2019.

Alcanzará también, según Marín, el récord de personas con empleo de toda la serie histórica y la tasa de paro se situará en el 13 por ciento, igual a la media estatal.

En base a esas previsiones, los ingresos no financieros alcanzarán los 5.739,26 millones de euros, 845 millones más que en 2022 (un 17,3 por ciento más), una cifra que procede en su mayor parte del sistema de financiación autonómica, que es de 4.148,26 millones, lo que supone un 24,7 por ciento más que el ejercicio anterior (822,37 millones más).

Otros 446,73 millones proceden de los tributos cedidos (48,78 millones más, un 12,26 por ciento); 294 millones más los aporta el sistema de financiación provincial (61,28 millones más, un 26,3 por ciento), y otros 231,4 millones corresponde a la subvenciones del estado y otras aportaciones (42,93 millones más, un incremento del 22,8 por ciento).

Además, se recibirán 452,6 millones de fondos europeos (18,8 millones menos) y 165,64 millones de otros ingresos (111,55 millones menos, un 40,2 por ciento menos).

En cuanto al objetivo de déficit, y aunque el mismo está suspendido por el estado, se ha utilizado una previsión prudente, del 0,3 por ciento, lo que equivale a más de 110 millones de euros, frente al 1 por ciento del ejercicio pasado, un límite que hubo que aumentar, ha dicho el consejero, ante la falta de fondos estatales para hacer frente a la crisis sanitaria del coronavirus.

Marín ha destacado también que el gobierno central prevé un déficit de hasta el 3,2 por ciento y ha lamentado ese gran endeudamiento que, ha dicho, no se corresponde con una mejor financiación de los pilares del estado de bienestar.

Marín ha insistido en la solvencia de este techo de gasto que, ha confiado, pueda salir adelante en los próximos días en la Asamblea Regional para poder así iniciar también la tramitación del presupuesto del próximo ejercicio.